Chiang Rai, Tailandia.-— Los 12 chicos y el entrenador de futbol rescatados de una cueva en Tailandia ya reciben tratamiento médico y se encuentran en buen estado, según las imágenes de video desde la clínica donde están hospitalizados transmitidas por la televisión tailandesa.
“Tras nuestra evaluación, están en buenas condiciones y no presentan estrés. Los niños fueron bien atendidos en la cueva. La mayoría perdió un promedio dos kilos”, declaró a la prensa Thongchai Lertwilairattanapong, inspector del departamento de la salud de Tailandia.
Precisó que están “en muy buenas condiciones mentales. Puede ser porque pasaron todo el tiempo juntos como equipo, ayundándose unos a otros”, y agregó que sólo tres de ellos tienen infecciones pulmonares menores.
El grupo, compuesto por 12 adolescentes de entre 11 y 16 años y su entrenador, de 25, permanecerá hospitalizado una semana para garantizar que recibe el tratamiento necesario, añadió.
El grupo quedó atrapado el 23 de junio en el interior de la cueva Tham Luang-Khun Nam Nang Non, en una región próxima a la frontera con Myanmar. Habían ido de excursión tras un entrenamiento de fútbol de su equipo “Jabalíes Salvajes”, pero una inundación repentina los sorprendió y quedaron aislados.
Fueron localizados por los equipos de rescate el 2 de julio y a partir de ahí comenzó una carrera contrarreloj. En el sudeste asiático es temporada de monzones y todo el tiempo acechaba la amenaza de que subiese el agua en la cueva y tuviese que interrumpirse el rescate. La operación de salvamento inició el domingo pasado con la salida de cuatro chicos, seguidos el lunes de otros cuatro. Finalmente, el martes salieron los últimos cuatro adolescentes y el entrenador, con lo que concluyó la misión.
Pese a ser considerada un éxito, ayer se reveló que muchas cosas pudieron precipitar un final distinto.
Narongsak Osottanakorn, jefe de la misión de rescate, explicó que la misión se aceleró debido a los bajos niveles de oxígeno y a la amenaza de nuevas lluvias. “El nivel de oxígeno [en la cámara de la cueva donde el equipo quedó atrapado] era sólo de 15%”, indicó. “Pero lo que no les dijimos antes es que la cifra descendió a un 12%, el grupo podía haber experimentado un shock y entrar en coma”.
Un grupo de buzos australianos también reveló ayer a medios británicos que las bombas de agua dentro de la cueva fallaron la tarde del martes, horas antes de concluyera el rescate, y el agua subió peligrosamente de nivel.
Ahora, las autoridades reconocen que la cueva podría convertirse en un sitio turístico, por lo que primer ministro Prayuth Chan-ocha dijo que se implementarán medidas adicionales, dentro y fuera de la cueva, para evitar que se repita la historia.
El jefe de la misión de rescate dijo que “el área se convertirá en un museo para mostrar el desarrollo de la operación”.
“Se establecerá una base de datos interactiva y se convertirá en otra gran atracción para Tailandia”, agregó Narongsak Osottanakorn.