El expapa Benedicto XVI quiere que se retire su nombre como uno de los autores de un controvertido libro sobre el celibato sacerdotal, dijo el martes su secretario personal, en el más reciente giro de una saga que ha capturado la atención del mundo católico.

El arzobispo Georg Ganswein dijo a Reuters que, a nombre del expapa, había pedido al autor principal del libro, el cardenal Robert Sarah, que se contactara con los editores y realizara los cambios necesarios.

El libro, "Des Profondeurs de nos cœurs" (Desde lo profundo de nuestros corazones), será lanzado en Francia el miércoles. Extractos fueron publicados durante el fin de semana, enfadando a algunos estudiosos católicos que dijeron que Benedicto XVI se arriesgaba a desestabilizar al papa Francisco.

El episodio ha subrayado la polarización entre conservadores y progresistas en la Iglesia de mil 300 millones de fieles y generó un nuevo debate sobre el rol de un expontífice.

Horas antes, Sarah rechazó las acusaciones de la prensa de que había utilizado el nombre de Benedicto XVI sin autorización y que se había aprovechado del expontífice de 92 años.

"Afirmo solemnemente que Benedicto XVI sabía que nuestro proyecto tomaría la forma de un libro. Puedo decir que intercambiamos varios textos para establecer las correcciones", escribió Sarah, de 74 años, en Twitter.

Más tarde dijo que debido a las polémicas, en futuras ediciones del libro, Benedicto XVI sería nombrado colaborador y no coautor. "Sin embargo, el texto completo permanece sin cambios", dijo.

En el libro, Benedicto XVI y Sarah defienden el celibato sacerdotal en lo que algunos han visto como un llamado estratégico a Francisco para que no cambie las reglas después de una propuesta de que permita que los hombres casados mayores se ordenen de forma limitada para lidiar con la escasez de sacerdotes en el Amazonas. Francisco está preparando un documento sobre el tema.

Sarah también emitió un largo comunicado en su propia defensa, detallando sus recientes reuniones con Benedicto XVI y reafirmando que el expapa fue informado de todo, incluida la portada del libro.

Dijo que las acusaciones de que estaba manipulando a Benedicto XVI eran "despreciables" y que su lealtad a Francisco era "total". También publicó una carta firmada de Benedicto XVI en la que el expapa escribió en italiano: "Por mi parte, el texto puede publicarse en la forma que usted ha previsto".

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