Tendencias

¿Mejorará la boda real del príncipe Enrique y Meghan Markle la economía británica?

A la mayoría de los trabajadores se le dio un día libre adicional cuando Guillermo, el hermano mayor de Enrique y el segundo en la fila del trono, se casó en abril de 2011

Varios productos temáticos de la boda entre el príncipe Enrique y la actriz estadounidense Meghan Markle son vendidos en una tienda de Windsor, Reino Unido Foto: EFE
14/05/2018 |17:49
EL UNIVERSAL San Luis Potosí
RedactorVer perfil

Es el titular de un popular periódico sensacionalista británico: La boda real traerá un ENORME impulso a la economía.

Un sector de la prensa británica ha sugerido que la boda del príncipe Enrique y Meghan Markle beneficiará a la economía del país por cientos de millones de libras esterlinas.

Es posible que el consumo minorista reciba un impulso de fanáticos y entusiastas que compran recuerdos de la boda real, además de comida y bebida para las celebraciones.

Pero la experiencia pasada muestra que los eventos de la realeza no suelen generar las grandes cantidades de dinero que las empresas desearían, y apenas influyen en la economía en general.

Titulares de diarios británicos sobre los beneficios de la boda del príncipe Enrique y Meghan Markle para la economía británica.

"Somos cautelosos de exagerar el impacto potencial o tratar de poner una cifra alta sobre las ganancias potenciales", dijo Howard Archer, asesor económico principal del Club EY ITEM.

Si la historia se repite, la boda real no influirá en términos económicos.

Según la Oficina de Estadísticas Nacionales del Reino Unido (ONS, por sus siglas en inglés), la boda de 2011 del príncipe Guillermo y Kate Middleton no generó un aumento notable de la economía.

A la mayoría de los trabajadores se le dio un día libre adicional cuando Guillermo, el hermano mayor de Enrique y el segundo en la fila del trono, se casó en abril de 2011, influyendo en la actividad económica de ese mes.

Dejando de lado el éxito del día libre adicional, no hubo un impulso notable para la economía.

PwC calculó que la boda de William y Kate generó aproximadamente 107 millones de libras esterlinas (145 millones de dólares) en gastos adicionales. Una cifra buena para el sector minorista, pero menos del 4% de la cantidad gastada en el Reino Unido el viernes negro, el día más activo de compras del año.

¿Resaca por venir?

Y cualquier derroche en gastos este mes puede ser seguido por una depresión en junio. Los datos de la ONS muestran que, si bien las ventas minoristas se dispararon en abril de 2011, cayeron al mes siguiente.

Es probable que los bares estén más ocupados gracias a los horarios ampliados. El Parlamento de Reino Unido permitirá que todos los bares permanezcan abiertos por la boda hasta la 1 a.m. el viernes y el sábado, a diferencia del usual límite de las 11 p.m.

Pero será difícil de precisar cuánto de la bebida adicional que se venda se deberá a la boda real. Sobre todo porque uno de los mayores eventos deportivos anuales del Reino Unido, la final de fútbol de la Copa FA, se celebra el mismo día.

Turismo real

En la última boda real tampoco hubo un aumento significativo en las llegadas de turistas ni en su gasto. La cantidad de personas que llegaron al Reino Unido en abril de 2011 casi no varió, y aproximadamente 500.000 británicos aprovecharon el día libre adicional para abandonar el país.

Se espera un patrón similar esta vez. Según los expertos en viajes, no ha habido un aumento notable en el número de reservas de vuelos al Reino Unido para la boda.

Los analistas esperan que cualquier aumento en las visitas de los fanáticos reales se contrarrestará con el deseo de otros turistas de mantenerse lejos de las multitudes.

Caerá el factor "sentirse bien"La economía del Reino Unido podría mejorar. El PIB británico creció solo un 0,1% en el primer trimestre de 2018, en comparación con los tres meses anteriores, lo que representa la expansión más débil en más de cinco años.

Con las preguntas políticas claves sin respuesta y el tiempo avanzando, los economistas dijeron que la incertidumbre sobre la salida de Gran Bretaña de la Unión Europea en marzo de 2019 y la presión sobre los salarios habían perjudicado el crecimiento.

Un factor de "sentirse bien" generado por la boda de Meghan y Enrique podría llevar a la gente a gastar más. Pero es poco probable que dure mucho tiempo.