El presidente estadounidense, Donald Trump, anunció que declarará emergencia nacional, alegando que hay una “crisis de seguridad nacional en la frontera sur”. Con ello, busca evadir al Congreso y usar recursos originalmente destinados a otros fines, como desastres naturales, para la construcción del muro.
Los demócratas y republicanos que se oponen a la declaratoria tienen dos caminos para enfrentar la medida: el Congreso y las cortes.
1. La vía legislativa. Aunque el Congreso no tiene la capacidad de impedir que el presidente declare una emergencia nacional, si puede determinar el fin de dicha emergencia si tanto el Senado como la Cámara Baja consideran que el mandatario está actuando de manera irresponsable o que la amenaza citada ya no existe.
El problema es que aunque los demócratas tienen mayoría en la Cámara Baja, en el Senado son minoría y requerirían del apoyo de al menos un puñado de republicanos, lo cual no está garantizado. Y aun si ambas Cámaras se pusieran de acuerdo, Trump tiene poder de veto.
2. La vía judicial. Gobiernos estatales y activistas advirtieron desde que Trump amenazó con declarar la emergencia que irían a la corte. La fiscalía de Nueva York ya anunció, de entrada, que recurrirá a la justicia, y el propio Trump reconoció que es muy probable que el caso termine en manos del Tribunal Supremo.
Históricamente, los jueces no han cuestionado declaraciones de emergencia emitidas por el mandatario, aunque expertos legales señalan que el historial de Trump, así como los reveses que ha sufrido con otras medidas en la corte pudieran hacer posible que un juez eche abajo la declaratoria. “Normalmente, en cualquier otro momento, diría que es obvio que el presidente siempre gana”, señaló el profesor de Derecho de la Universidad de Texas, Bobby Chesney, al portal Politico. “Pero ahora mismo no hay garantías de que Trump reciba esta deferencia”.