La policía española dijo el martes que liberó mujeres, en su mayoría ucranianas, atraídas a España con la promesa de trabajo como camareras de hotel, pero forzadas a ejercer la prostitución.
Una pandilla internacional había forzado a más de 200 mujeres con el mismo método desde 2015, dijo la policía en un comunicado.
Atraían a las mujeres mediante publicidad online que ofrecía un préstamo para el viaje y trabajo bien pagado en hoteles de Burgos, una ciudad en el norte de España. Al arribar se las obligaba bajo amenaza de violencia a ejercer la prostitución durante 10 horas diarias, los siete días de la semana. Se les cobraba multas para garantizar que nunca terminaran de pagar el prestamo.
Dos españoles y dos ucranianos fueron arrestados bajo sospecha de tráfico de seres humanos, asociación para delinquir y otros delitos.