El Departamento de Justicia de Estados Unidos reconoció hoy que es "ilegal" la orden ejecutiva firmada por el presidente, Donald Trump, para acabar con la separación de niños inmigrantes de sus padres en la frontera sur del país.
"Sí, es ilegal, es claramente ilegal", dijo un consejero de la Fiscalía General, Gene Hamilton, en una conferencia telefónica con la prensa.
No obstante, Hamilton señaló que las autoridades están haciendo "el papeleo ante una corte federal de California para garantizar que se encuentre una solución" a este respecto.
Dicho acuerdo fue respetado por las sucesivas Administraciones hasta que en 2014 el expresidente Barack Obama violó el pacto cuando se produjo la entrada masiva de menores procedentes de Centroamérica.
Y dos años más tarde un juez federal de California falló contra esa política y estableció el límite de 20 días de arresto para los niños y sus acompañantes adultos.
Después, una corte de apelaciones decidió aplicarlo solo a losniños.
El asesor explicó que estas medidas están destinadas a ganar tiempo hasta que el Congreso adopte una resolución: "El Congreso tiene que actuar, puede arreglar esta situación mañana", avisó.
"El presidente ha tomado una decisión audaz, pero solo el Congreso puede abordar este problema, le pedimos que actúe rápidamente", subrayó.
Hamilton se refería a las dos iniciativas sobre inmigración que está previsto que sean votadas mañana en la Cámara Baja.
Trump firmó hoy una orden ejecutiva que permitirá permanecer junto a sus padres en centros de detención a los niños que cruzan irregularmente la frontera con México, de forma que dejarán de ser separados de sus padres mientras ellos son enjuiciados por la vía criminal.
Sin embargo, esa orden ejecutiva de Trump puede violar el acuerdo Flores de 1997, al que llegó el Gobierno del entonces presidente, Bill Clinton, con dos organizaciones humanitarias y que establece que los menores no acompañados detenidos en la frontera solo pueden ser privados de libertad durante 20 días.