Los presidentes de Guatemala, Jimmy Morales, y de Honduras, Juan Orlando Hernández, hablaron por teléfono con su homólogo mexicano, Enrique Peña Nieto, para coordinar el plan migratorio que atenderá a los miles de migrantes hondureños.
El Gobierno guatemalteco indicó, en sus redes sociales, que los dos mandatarios, tienen una reunión en Ciudad de Guatemala, están definiendo "la asistencia humanitaria y el retorno ordenado de los migrantes que se encuentran en la frontera Guatemala-México".
Miles de migrantes hondureños, al menos 3 mil según la ONU, salieron hace una semana de San Pedro Sula con el objetivo de llegar a Estados Unidos, pero en estos momentos la mayoría se encuentran varados en la frontera entre Guatemala y México, donde los detuvo la Policía Federal.
Juan Orlando Hernández, llegó a la capital guatemalteca para abordar con el mandatario de Guatemala, Jimmy Morales, un plan migratorio que pueda solventar la crisis de los miles de migrantes hondureños.
Hernández aterrizó en la Fuerza Aérea Guatemalteca unos minutos antes de las 09:30, hora local, donde fue recibido por la canciller de Guatemala, Sandra Jovel.
Ahora se prevé que los dos presidentes mantengan una reunión, junto con varios funcionarios de Gobierno, para "generar la estrategia y logística a implementar ante la actual problemática migrante" y luego darán un mensaje a la prensa.
Tras seis jornadas de viaje a pie, la caravana de migrantes, integrada por unas 3 mil personas según Naciones Unidas, arribó este viernes a México, tras librar la barrera que había sido intermediada por el Gobierno guatemalteco.
Después de un primer momento de euforia, los migrantes fueron contenidos por la Policía Federal, lo que desencadenó momentos de tensión.
Este sábado, algunas decenas cruzaron el río que separa a ambos países en balsas, aunque la policía de México cerró posteriormente el paso.
El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, amenazó esta semana con un cierre militar de la frontera sur de su país si México no lograba detener la caravana y también advirtió a Guatemala, El Salvador y Honduras que cortaría la ayuda estadounidense si los migrantes ingresan al territorio norteño.