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Keith Raniere, el hombre acusado de liderar la secta sexual Nxivm, se autopercibía como un “gran maestro, todopoderoso” y esa era la imagen que le vendía a sus esclavas sexuales; sin embargo, minutos antes de su arresto en Puerto Vallarta, corrió y se escondió en un armario para tratar de evadir a las autoridades.
Lo anterior fue dado a conocer este martes, en el tercer día de testimonios de Lauren Salzman, quien ha sido identificada como miembro clave de la agrupación. En su rol de testigo ante una corte de Brooklyn, relató cómo fueron los momentos previos a su captura en marzo de 2018.
Medios como The New York Post dieron a conocer las declaraciones. Salzman testificó que la propiedad en la que se encontraban fue rodeada por policías con ametralladoras, chalecos antibalas y máscaras.
“Mientras golpeaban la puerta, Keith me pidió que les preguntara si tenían una orden de arresto, al tiempo que corría hacia un armario con llave para ocultarse”, recordó, según el Post. Sintió miedo. “Pensaba que podían disparar: podrían dispararme en este momento'”, aseveró.
La mujer de 42 años, quien fungía como “maestra de esclavos” en el grupo criminal y ya declarada culpable, contó que, incluso tras ser rodeada por los oficiales armados, permaneció leal a su líder, aunque al final, reconoció, éste la decepcionó.
“Elegí actuar conforme a lo que creía que habíamos estado entrenando durante todo este tiempo. Elegí el amor”, dijo en referencia a las prácticas de veneración que se llevaban a cabo hacia Raniere. "Nunca se me ocurrió que elegiría a Keith y Keith elegiría a Keith", agregó.
Según reporta el Post, Salzman reconoció que su amorío con Keith Raniere le otorgó un rango privilegiado en la secta, en una hermandad denominada “DOS” (Dominante Sobre Sumiso), misma que planeaba una orgía de la cual ella formaría parte junto con las actrices Allison Mack (Smallville) y Nicki Clyne (Battlestar Galactica), entre otras personas cuya identidad permanece desconocida.
Durante la tercera semana del juicio en contra de Raniere, salió a la luz que éste estaba en el proceso de escribir un manual de sus retorcidas obsesiones, situación que fue confirmada por Salzman, quien confesó que ayudaba con la edición del tomo de 120 páginas, pensado sólo para los devotos seguidores del culto. "El libro sería muy bonito y la gente lo estudiaría", comentó a los miembros del jurado.
Lauren afirmó que el propósito del escrito era mostrar cómo se podía servir mejor a un amo, además de que su comercialización era uno de los objetivos de Raniere quien, según los testimonios, planeaba instalar casas de hermandad de mujeres en todo el país, una vez que la popularidad de la secta fundamentada en esclavos y maestros aumentara en el país.
Con información de The New York Post.
