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El conductor de la camioneta que el lunes atropelló “deliberadamente” a peatones en la ciudad canadiense de Toronto con saldo de 10 muertos y 14 heridos fue inculpado ayer en un tribunal de 10 cargos de homicidio premeditado. Según la policía, el agresor dejó previamente “mensajes enigmáticos” en redes sociales.
Los primeros elementos de la investigación apuntan a que el acusado sentía rencor por las mujeres. “Es justo decir” que las víctimas son “mayoritariamente mujeres” entre los 20 y los 80 años, reconoció en rueda de prensa el investigador Graham Gibson. La policía de Toronto, sin embargo, aseguró “no tener pruebas” que demuestren que el objetivo del acusado eran las mujeres, matizó Gibson.
En su primera aparición ante una corte, Alek Minassian, de 25 años, permaneció de pie vestido con mono blanco, la cabeza rapada y las manos detrás de la espalda. Fue acusado también de varios cargos de intento de asesinato.
Minutos antes del atropello, el acusado “publicó un mensaje enigmático en Facebook”, afirmó Gibson.
Varios medios de comunicación canadienses publicaron una captura de pantalla del mensaje que subió a la red social: “La rebelión de los ‘incel’ ha comenzado”. El mensaje también expresó admiración por Elliott Rodger, un hombre que mató a seis estudiantes universitarios antes de quitarse la vida en California en 2014 y que según investigadores actuó influido por su rechazo hacia las mujeres. Facebook reconoció que “limpió de inmediato la cuenta” de Minassian.
El término “incel” es una abreviatura del inglés “involuntarily celibate (involuntariamente célibe)”, y hace referencia a hombres que sienten cierto grado de desprecio por las mujeres, a las que culpan de su insatisfacción sexual.
El atropello tuvo lugar a unos 16 km de donde se celebraba una reunión de los cancilleres del Grupo de los Siete (G7), pero funcionarios aseguraron que no había evidencias de que el incidente tuviera vínculo con el evento. “Este acto parece claramente deliberado”, dijo el lunes el jefe de la policía de Toronto, Mark Saunders.
El ministro de Seguridad Pública, Ralph Goodale, afirmó que “la información disponible en esta etapa indica que este acto no parece estar relacionado con la seguridad nacional”. El primer ministro Justin Trudeau también descartó que el ataque esté ligado al terrorismo. “No tiene conexión con la seguridad nacional”, dijo.
Además de los fallecidos, entre los que figuran dos surcoreanos, 14 personas permanecían internadas en hospitales de toda la ciudad, informó Saunders, rectificando el conteo de heridos, que originalmente era de 15.
Minassian arremetió el lunes con una camioneta blanca contra peatones sobre la acera de la calle Yonge, una de las más frecuentadas del país, según la policía. El conductor fue detenido 26 minutos después.
El acusado vive con su padre en Richmond Hill, un suburbio de Toronto, y fue alumno del Seneca College, según su perfil en LinkedIn.
Estudiantes que concurrieron a una escuela vocacional con Minassian lo describieron como reservado y un poco raro. Hablaba poco en la escuela y al parecer se rascaba constantemente la cabeza y las manos, síntoma de desorden obsesivo-compulsivo.
El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, calificó de “tragedia” el atropello. La Unión Europea y otros gobiernos expresaron su solidaridad con las familias de las víctimas.