Ubicado en el altiplano potosino, Real de Catorce se ha logrado posicionar como uno de los sitios favoritos para visitar en San Luis Poyosí. Haciendo honor a su nombramiento como pueblo mágico, guarda todo tipo de encantos, pero sin lugar a dudas uno de sus principales atractivos es el túnel del Ogarrio, justo a la entrada del municipio.
El pueblo mágico fue un próspero núcleo colonial de la minería de plata cuyo emblemático túnel que hoy cumple 120 años fue realizado para acortar la distancia entre Catorce y el costado oriente de la sierra donde se ubican numerosas bocaminas, como la de Santa Ana.
La inauguración se celebró el 2 de abril de 1901, alcanzando una distancia de casi 2 mil 300 metros, facilitando el transporte de los minerales a las haciendas de beneficio de Potrero, Cedral y Matehuala, situadas en la planicie oriental.
Recorrer el Ogarrio resulta una experiencia única que brinda un gran valor a la visita del pueblo mágico. Lo más recomendable es atravesarlo a pie para sentir el frío, la humedad y el olor, elementos que transportan a cómo era la vida en ese lugar hace 100 años, y permite imaginar las jornadas de los mineros que ahí pasaban largas jornadas.
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De acuerdo con los historiadores, la casa Maza mandó construir en San Francisco, California unas bombas para ser instaladas en las minas de Santa Ana (Propiedad de la casa Maza). Los directivos de la negociación acordaron que la instalación debía ser un acontecimiento y por ello invitaron al Presidente de la República, el General Porfirio Díaz, para que asistiera a la inauguración de las maquina mineras.
Fue en junio de 1895 cuando se llevó a cabo la visita presidencial; Porfirio Díaz y su comitiva viajaron por ferrocarril desde la Ciudad de México hasta la estación que había en Potrero y de allí se trasladaron a Santa Ana en un carro tirado por mulas, donde ya los esperaban los festejos y la recepción de acuerdo con su investidura.
Esa noche, Díaz pernoctó en Santa Ana y al día siguiente se trasladó a caballo a Real de Catorce. La iniciativa de perforación para hacer el túnel fue de los Condes de la Maza: Santos, Gregorio, Joaquín y Pedro; el trazo lo hizo Vicente Irizar y fue quien le puso el nombre de Ogarrio, por llamarse así el pueblo donde nació en España.
Fue así cuando el 23 de julio de 1897 comenzó la perforación del cerro, concluyendo el 2 de abril de 1901 con una distancia de 2 mil 300 metros y un costo de un millón de pesos.