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El pasado mes de agosto el alcalde de Axtla de Terrazas, “Goyo Cruz”, protagonizó un escándalo en un hotel de lujo en Cancún, Quintana Roo, esto luego de que se enfrascó en una discusión que acabó en un zafarrancho y provocó la detención del edil y su esposa.
Luego de un mes, finalmente el presidente municipal habló al respecto y atribuyó su detención a "un trasfondo político". Gregorio Cruz Martínez aseveró que tiene una excelente relación con el gobernador Ricardo Gallardo Cardona, esto a pesar de que no ha tenido comunicación con él desde antes de su detención en un hotel de Cancún, Quintana Roo, incidente que el edil insistió en que fue víctima de un ataque mediático doloso y de índole político por ser el único alcalde morenista de la Huasteca potosina.
“Soy el único alcalde morenista, el único que se ha mantenido con los ideales de la 4T, eso conlleva que haya golpeteo político y que nos empiecen a atacar… las informaciones de los medios tienen que ser con pruebas no nada más con dichos, que alguien dijo… en el tema de Cancún siempre he dado la cara, cada quien es responsable de sus actos”, comentó el alcalde.
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Asimismo, dijo ser respetuoso de las duras palabras que el secretario general de Gobierno, J. Guadalupe Torres Sánchez, tuvo para su parte luego de este incidente y aunque sea un funcionario de alto nivel, también es un ciudadano y como tal se respetan sus opiniones; no obstante, aseguró que la realidad es que él y su familia fueron víctimas en aquel incidente en el Caribe mexicano.
Añadió que incluso la propia ministerio público de Quinta Roo le manifestó que se le hacía increíble que un caso que ameritaba no más que una falta de tipo administrativo se hubiera convertido en una nota a nivel nacional: “hay personas que han matado o que han hecho desfalcos y no pasa nada ni les hacen escándalo”.
Finalmente, Gregorio Cruz refirió que su esposa fue violentada en sus derechos humanos y, evidentemente, la iba a defender y lo volvería ha hacer porque son cuestiones que no se pueden tolerar, de igual manera rechazó que la membresía del hotel fuera de una cantidad exorbitante, ya que sólo costaba, según dijo, alrededor de 2 millones de pesos a pagarse en varios años, misma que decidió cancelar tras el incidente.
