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Desde hace más de dos años, el ayuntamiento de Soledad impulsa el programa Ambudog para atender a mascotas que se encuentran resguardadas por sus dueños en domicilios. Actualmente, este esquema cuenta con una gran aceptación entre la ciudadanía, pues ya acumuló alrededor de 8 mil consultas gratuitas realizadas a perros, gatos y en ocasiones especiales, a conejos e iguanas.
Gabino Manzo, director de Servicios Municipales, dijo que la situación económica y la pandemia tuvieron un impacto en las familias y en consecuencia, en las mascotas, las cuales, a veces, pueden caer en un maltrato involuntario al ser relegadas a espacios del hogar que no son apropiados para ellas, incluso a las azoteas o a la calle.
Foto: Especial
Esto afecta su condición de salud, por lo que a partir de la emergencia sanitaria el 95% de las atenciones se centraron en la desparacitación y el diagnóstico oportuno para el cuidado de estos animales.
Programa no distingue territorialidad
Actualmente, Ambudog cuenta con dos veterinarios, una asistente y un chofer que viajan a lugares de fácil acceso dentro de Soledad, como son los centros comunitarios o espacios deportivos, a fin de que los dueños de las mascotas puedan acudir a los sitios en los días que se anuncian previamente en redes sociales del ayuntamiento.
“Concientizamos mucho a la gente de la importancia que tiene el cuidado de las mascotas y que éstas se mantengan porque son parte de la familia, ya que conviven de manera muy íntima y hay ciertas enfermedades que se pueden transmitir, por eso se da orientación en cuestiones como la alimentación, donde se recalca que hay que suprimir ciertas cosas y que si la situación económica no lo permite, evitar darles los huesos chicos o algunos alimentos que nos puedan dañar, así como consejos como el que tengan agua, un espacio techado y que no se pongan en vulnerabilidad”, señaló.
Foto: Especial
Manzo refirió que este programa es un precedente de una larga cadena en la que se busca que más estrategias como esta puedan implementarse no solamente en otros municipios, sino en todo el estado, como parte de la política de salud de la población y de los animales, ya que actualmente los servicios que se prestan en la unidad no distinguen territorialidad, pues igual acuden dueños de mascotas de la capital potosina, pues el interés es proporcionar el cuidado y la atención de los especímenes.
Reconoció, además, que es un programa costoso que requiere personal preparado e insumos para dar atención, como en el caso de las esterilizaciones o castraciones, cuyo costo promedio es de alrededor de 700 pesos por animal y que en caso, por ejemplo, de la anestesia, se requiere de una mayor dosis en mascotas de seis o siete kilos, por lo que implica un esfuerzo importante para llevarlo a cabo.
“La gente lo aprecia y más allá de la atención médica es la conciencia que tratamos de generar entre la población de que sean responsables en el cuidado de sus mascotas, pues también forman parte del núcleo de las familias y es importante generar las condiciones adecuadas para su resguardo”, finalizó Gabino Manzo.
etp