Profesores de corrientes democráticas al interior del Sindicato Nacional de Trabajadores de la Educación (SNTE) previeron que se desate una disputa por el control de las cuotas magisteriales con los nuevos sindicatos a partir del próximo sexenio.

Tras la salida de la maestra Elba Esther Gordillo de prisión domiciliaria, el sobreseimiento de su caso y el triunfo de Andrés Manuel López Obrador como presidente electo, no es sencillo el momento actual ni lo que viene para el SNTE, y se debe medir “qué es lo que se puede hacer y qué no”, consideraron profesores que asistieron a una reunión en un hotel de la Ciudad de México.

“Estamos en un momento coyuntural muy importante. Debería haber más cohesión, unidad e iniciativa política. El sindicato está en un momento en el que menos probabilidades se tiene para hacer eso”, señalaron.

En un encuentro en el que se planteó la necesidad de redefinir el rumbo de la vida sindical, los maestros coincidieron en encontrarse ante una “nueva realidad y una nueva correlación de fuerzas, distinta pero con claroscuros, donde no termina de aparecer lo nuevo ni desaparecer lo viejo”.

Previeron que ante el debilitamiento del SNTE y el contexto político generado a raíz de las elecciones y de la liberación de Gordillo, los otros sindicatos existentes pudieran cobrar fuerza y surgir uno más, dirigido por la maestra para pelear por la titularidad de la relación con el patrón, en este caso la Secretaría de Educación Pública (SEP), lo que en realidad esconde el conflicto por el manejo de las cuotas sindicales, que representan 1% del salario quincenal de 1.2 millones de docentes en México.

Personas que asistieron a la reunión dijeron que no calculan la intervención de Andrés Manuel López Obrador ni de Olga Sánchez Cordero, propuesta como la próxima secretaria de Gobernación, en el SNTE, pero sí avizoran un conflicto intersindical.

Este conflicto se dispararía a partir del Sindicato de Trabajadores de Maestros, creado por Carlos Jonguitud Carrillo, hijo de Carlos Jonguitud Barrios, quien fuera el antecesor de Elba Esther Gordillo como líder del SNTE; uno más impulsado por Joel Ayala, líder del sindicato de burócratas, y por último la creación de uno nuevo, de la mano de Gordillo Morales.

“Hay dos vías: mover y crear un conflicto en las secciones [sindicales], lo que no permitiría López Obrador porque lo que necesita es paz para gobernar. Lo que puede hacer es registrar otro sindicato y entrar a la disputa por la titularidad laboral y el asunto de las cuotas”, señalaron testigos que participaron en la reunión.

Cuestionan perfil para SEP. Los maestros discutieron el nombramiento de Esteban Moctezuma al frente de la SEP, al considerar que carece de méritos suficientes, puesto que si bien fue funcionario de esta dependencia en el sexenio de Carlos Salinas de Gortari, lo atribuyeron al pago de favores políticos del presidente electo con el próximo funcionario.

Entre los asistentes a la reunión se escucharon comentarios que señalaban que Elba Esther Gordillo habría operado para ese nombramiento, dada su cercanía política con Moctezuma Barragán.

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