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"Lo que se está viviendo en nuestro país no es un golpe de Estado. Lo que sucede en Bolivia es un movimiento civil y pacífico", consideraron integrantes de la comunidad boliviana residente en México.
De acuerdo con el grupo Disidentes Bolivianos, contrarios al gobierno de Evo Morales, en Bolivia no se vulneraron normas de sucesión ni las fuerzas armadas desconocieron al presidente.
"Lo que sucede en Bolivia es un movimiento civil y pacífico que aglomera a diferentes sectores de la población en todo el territorio del país con el objetivo de defender la democracia y el respeto al orden constitucional de nuestro país", leyó Érika Cano Camacho, integrante de este grupo.
Consideraron que grupos de cooperativas, sindicatos, campesinos, indígenas y otras organizaciones que apoyaban al gobierno de Evo Morales se pronunciaron en contra del mismo luego del último proceso electoral y la "represión y falta de comprensión" del gobierno en contra de personas ajenas al Movimiento al Socialismo, partido del presidente.
"La última institución en tomar la palabra fueron las fuerzas armadas, las cuales sugirieron a Evo Morales renunciar para preservar la seguridad de la población y buscar una salida democrática y constitucional al conflicto".
Aseguraron que el gobierno de Morales activó una campaña de desinformación y de terror a nivel internacional y han promovido "actos de violencia extrema" en el país además de buscar "frenar la organización de las sesiones de congreso necesarias para aprobar su renuncia y designar una nueva presidencia en el Senado que pueda asumir la presidencia del país, instituir un nuevo tribunal electoral y llamar a elecciones".
