Esta tarde, ante la cúpula empresarial del país, el presidente Enrique Peña Nieto sentenció que en los próximos meses no estará en juego la continuidad de un gobierno sino el desarrollo nacional y el bienestar de las familias mexicanas.

En su última participación ante la Asamblea General Ordinaria del Consejo Coordinador Empresarial (CCE)realizó un balance del cumplimiento de la Agenda por México -que signó con este organismo empresarial en 2012- y defendió con energía las reformas educativa, energética y fiscal.

Advirtió que retroceder en los avances de la agenda educativa implicaría "hacer rehenes a los alumnos y a sus maestros y vulnerar el futuro de la niñez y el la juventud mexicana"; destacó que con la reforma energética hay inversiones comprometidas por 200 mil millones de pesos y demandó mantener estabilidad macroeconómica para cuidar la economía familiar.

Peña Nieto recordó que a finales de los 70, con el agotamiento del modelo de intervención estatal en las actividades empresariales, el país aprendió que la estabilidad macroeconómica y el crecimiento económico "no se producen por decreto ni por la decisión de un gobernante".

Dijo que para corregir el rumbo fue necesario que el Estado se retirará de la mayoría de las actividades económicas y que México se abriera al mundo globalizado y que a principios del Siglo XXI la necesidad de incorporar a este desarrollo a sectores excluidos marco un parteaguas.

"El desarrollo económico incluyente es, de hecho, el eje central de la Agenda por México, elaborada por el CCE en 2012 y que suscribí como Presidente electo, también es la base de las cinco metas del Plan Nacional de Desarrollo y de los 266 compromisos de gobierno que formalice en mi campaña", indicó Peña Nieto.

El Ejecutivo dijo que a unos meses de que se decida el rumbo político de la nación, celebra que el CCE este nuevamente construyendo una agenda amplia (Agenda México Mejor Futuro que presentará a los candidatos presidenciales) y con visión de futuro como la que diseñaron en 2012.

"Esta agenda debe ser un instrumento que le permita a nuestro país seguir avanzando por la ruta de prosperidad y desarrollo que nos hemos trazado y que tanto trabajo nos ha constado durante tantas décadas. Porque lo que está en juego no es la continuidad de un gobierno, lo que está en juego es el desarrollo de nuestro país y el bienestar de las familias mexicanas", dijo.

El Presidente de la República asentó que el diálogo del gobierno con los empresarios ha sido esencial para avanzar en la ruta trazada desde 2012, cuando era candidato presidencial e hizo un repaso de los avances y rezagos en los compromisos de gobierno.

"Hacer bien las cuentas, como sabe cualquier empresario es importante para tener claridad de cuáles han sido los éxitos y dónde están aún las oportunidades y desafíos. De ahí la importancia de hacer bien las cuentas en este foro de los avances en la Agenda por México", dijo ante el empresariado nacional.

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