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Celia Osmara Cisneros fue diagnosticada a los diez años con cáncer de sangre y médula ósea (leucemia linfoblástica) en el Hospital General Regional (HGR) Número 1 de Ciudad Obregón, Sonora, sin embargo, a tres años de de su diagnóstico y después de recibir 120 sesiones de quimioterapia logro vencer el cáncer.
Lizette Bojórquez Steffany doctora responsable del área de Oncología Pediátrica del hospital, puntualizó que los tres años de terapias implicaron tratamiento con diversos medicamentos intravenosos, intramusculares y orales, atención que le permitió a Celia tocar el 17 de mayo la “campana de la vida”.
La “campana de la vida” es una campaña que se utiliza en hospitales del seguro social de distintas entidades y cuando la tocan simboliza que los pacientes están curados de su enfermedad. Dicho acto también es un llamado de esperanza en niños y adultos que inician un tratamiento contra el cáncer, para demostrar que es posible curarse y recobrar una vida normal y sana.
Bojórquez Steffany indicó que Celia Osmara continuará bajo el cuidado de médicos especialistas en oncología, cardiología, endocrinología, medicina física y rehabilitación durante cinco años más, con el objetivo de vigilar que el tratamiento médico siga teniendo un efecto positivo.
Finalmente, la especialista dijo que cada año se atiende aproximadamente a 30 menores con leucemia linfoblástica con promedio de vida de 75 por ciento de los casos a cinco años de inicio de tratamiento.
vkc
