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“Sería muy importante que de alguna manera se nos brindara lo necesario para que una pipa de turbosina estuviera aquí en el área y nos brindara el apoyo con combustible”, fue la última solicitud vieograbada de Miguel Ángel Ramos Machorro, capitán de corveta del Helicóptero M1-17 accidentado en la Sierra Gorda de Querétaro este viernes.
La entrevista habría sido otorgada al ingeniero Fernando Rocha Mier, coordinador de la Universidad Autónoma de Querétaro en la zona serrana, con el objetivo de transparentar el recurso recabado a través de una colecta entre miembros de la comunidad estudiantil.
El piloto helicopterista detalló que naves como el M1-17 tienen un consumo de combustible de 800 litros de turbosina, por lo que solicitaban el apoyo para contar con una pipa de turbosina en el área para evitar acudir hasta la zona más cercana de recarga, el aeropuerto de Querétaro, lo que estimó les quitaría hasta una hora y media de tiempo que podría ser aprovechado en el combate al incendio forestal que se mantiene en la Sierra Gorda.
En este accidente perdieron la vida cinco elementos de la marina y un integrante de la Comisión Nacional Forestal; además del capitán Ramos Machorro, también perdieron la vida los tenientes José de Jesús Medina Santiago y Carlos del Toro Rosas; los marinos Misael Maneses Maldonado y Andrés Valdovinos López y Luis Fernando Pérez Balderas, brigadista de la Conafor.
