José Alfredo Hernández Valencia tiene 25 años y muchas ganas de convertirse en ingeniero, como los profesionistas con los que convivió diariamente durante tres años al trabajar en el proyecto del Nuevo Aeropuerto de la Ciudad de México, en Texcoco, Estado de México. Su contrato era por cuatro años más.

“En esos cuatro años yo pensaba estudiar y terminar una carrera. La empresa ya me había dado la facilidad de seguir estudiando pero ahorita, pues ya no. Yo quería estudiar ingeniería en obra civil y con este proyecto que es para muchos años… pensaba que si permanecía y aguantaba, algún día iba a poder entrar a trabajar aquí con un buen puesto”, dijo.

Hasta hace una semana, conservaba la esperanza de poderentrar a la universidad para estudiar y convertirse en profesionista.

Finalmente, había conseguido autorización de la empresa en la que trabaja como encargado del sistema de rebombeo de aguas pluviales, para faltar a trabajar los sábados. Ese día lo iba a dedicar a estudiar una carrera abierta.

El sueño quedó suspendido o en pausa hoy por la mañana cuando José Alfredo se enteró del anuncio del gobierno electo de que cancelará el proyecto en Texcoco.

“En otros lugares, en las fábricas te pagan 800 o mil pesos a la semana y te piden que trabajes turnos muy largos, si uno tiene hijos o familia no te alcanza. Aquí, un trabajador está ganando 4 mil 500 pesos a la catorcena, tenemos contrato, prestaciones superiores a las de la ley, mi contrato era de 4 años. Nos afectó demasiado. No sé qué voy a hacer”, explicó.

Para José Alfredo, cuyo hermano Brandon Michael también trabaja en la obra, trabajar en este proyecto implicaba sentirse orgulloso de contarle a su familia. Piensa que la gente no conoce lo que está pasando dentro de la obra, y que si conocieran la tecnología que se está utilizando, verían la obra con otros ojos.

"Yo hablaba mucho de esto porque me sentía orgulloso de trabajar aquí. Me sentía orgulloso de platicarle a mi familia y a mis amistades, de subir fotografías (a las redes sociales) de lo que estábamos haciendo. Uno siente feo porque la gente dice cosas que realmente no sabe lo que está pasando aquí dentro", dijo.

Google News

TEMAS RELACIONADOS