Durante las campañas políticas muchos candidatos que buscan un puesto público se valen de diferentes tipos de eventos para atraer votantes, desde el clásico mitin hasta eventos para el entretenimiento colectivo, uno de estos eventos es llevar lucha libre a las colonias donde se buscan los votos.
Hace algunos días entre los aficionados a la lucha libre se hizo viral un video donde el candidato a la diputación por el distrito II en San Luis Potosí, José Luis Romero Calzada, promovía su campaña desde un ring combatiendo a dos luchadores y entre maromas y movimientos mal realizados se mostraba ganador ante el público para al final bailar una canción a favor de su campaña.
Los reclamos no se hicieron esperar, ya que se tomó como una afrenta al deporte de la lucha libre, al hacer creer al público que una persona que nunca se había subido a un ring ni tomado el más mínimo entrenamiento, podía ganarle a dos luchadores.
La situación actual de la lucha libre en San Luis Potosí no es nada alentadora, ya que desde el cierre del mayor inmueble de este deporte, la Arena Coliseo, los luchadores han perdido oportunidades y foros para desarrollarse, sumado a esto, la lucha libre es uno de los deportes más olvidados por las instancias municipales y de gobierno, ya que no cuentan con espacios para entrenar, seguro médico ni difusión de sus actividades, pareciera que la única vez que se acuerdan de ellos es para promover campañas políticas.
En otra denuncia, el luchador potosino “Meteoro” por medio de redes sociales mostró su inconformidad al ser programado en una función a favor del PRD, donde le prometieron un pago de cien pesos por su trabajo, cosa que lo molestó ya que esa cantidad no cubriría ni los gastos del trasporte, además del riesgo que conlleva la lucha libre y no queda exento de alguna lesión que pudiera ocurrir.
El luchador “Diablo Negro” era el encargado de esta función, según testimonios el arreglo quedaría en esa cantidad porque dijo que “estaba empezando el proyecto” y que por eso les pagaría poco a los luchadores, mientras que el denunciante declaró que no era justo ese pago, ya que algunos promotores las funciones de lucha libre en campañas las cobran arriba de 5mil pesos, más el costo del ring y transporte; según se dice cobran barato para que después reciban beneficios de campaña si el candidato sale ganador.
Algunos candidatos han querido apoyar este deporte; el candidato a la misma diputación, Ricardo Gallardo Cardona sostuvo una reunión con luchadores locales, donde le plantearon diferentes necesidades que se tienen como gremio, desde la inclusión al seguro popular, como un fondo para el retiro entre otras peticiones, aunque muchos luchadores argumentan que sólo se han quedado en promesas.
Como ejemplo está el municipio de Rioverde, donde el ayuntamiento creo un gimnasio para que se entrenara lucha libre, incluso luchadores de la capital han ido a dar clínicas de entrenamiento a esas instalaciones.
Aunque en San Luis Potosí se cuentan con diferentes arenas como la Arena Rayos de Plata, Arena Margarita, Arena San Felipe, Villas del Sol y Arena Del Ángel, ninguna es un inmueble 100% planeado para este deporte, la mayoría son bodegas, salones de fiestas o lotes baldíos adaptados con un ring para hacer éste deporte espectáculo.
Al respecto la comisión de box y lucha del ayuntamiento no ha emitido una postura sobre las condiciones de este deporte en la capital potosina y solo se dedican a emitir o revocar licencias de luchadores.
Las luchas políticas son a nivel nacional
No solo en San Luis Potosí se presentan estas situaciones, candidatos presidenciales como José Antonio Meade y Ricardo Anaya han utilizado espectáculos de lucha libre para promover sus campañas, aunque se desconoce el costo de las mismas, ellos han utilizado figuras de la talla de Blue Demon, L.A. Park, entre otros.
