La política de comunicación que el presidente de la República Andrés Manuel López Obrador implementó en su gobierno ha sido bastante atrevida, la cual será complicada sostener a lo largo de su sexenio.

El mandatario ha logrado una línea muy directa con la ciudadanía al comunicar de viva voz lo que quiere hacer, sus planes, políticas y contestar a los puntos de vista de la oposición sobre las críticas que se le hacen a su gobierno, implica un desgaste, consideró Jorge Héctor Ávila Hernández, director de la Facultad de Ciencias de la Comunicación de la Universidad Autónoma de San Luis Potosí (UASLP).

El catedrático señaló que el mandatario sigue manteniendo un alto porcentaje de aceptación que aún le alcanza gracias a que más de la mitad del electorado votó a su favor.

Sin embargo, consideró que uno de los problemas de López Obrador es que quiere transformar el país de manera sumamente acelerada, es decir, está forzando muchos procesos, lo cual se observó con la renuncia de su secretario de Hacienda.

“Es un área fundamental que tiene los recursos y la presión a la que ha estado sujeta, es muy grande para atender todo el rezago que él quiere atender como el de la pobreza a través de los programas de apoyo, o a los estudiantes, personas de la tercera edad, mujeres trabajadoras.

Esto quiere decir que son varios sectores a los que quiere apoyar sin endeudar más al gobierno mexicano y resolver las necesidades sociales y económicas de la población en muy corto plazo”, concluyó Héctor Ávila Hernández.

sergio.marin@clabsa.com.mx

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