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Mario Lárraga Delgado, legislador acusado por acoso sexual por parte de su asistente personal, trató de huir de los medios de comunicación que esperaban su salida de la reunión de la Junta de Coordinación Política.
Su partida se aceleró, debido a que la sesión de la Jucopo fue suspendida ante la irrupción de su presunta víctima quien acompañada de María de Jesús Almendariz Prieto “Marichuy”, reclamaron al legislador el haber cambiado la chapa de la oficina de sus asistente momentos después de una rueda de prensa en la que ella anunció que presentaría una denuncia, “oiga acabamos de dar una rueda de prensa ahorita a las 11:00 de la mañana y ya nos cerró el cubículo”, cuestionó Marichuy, “¿o sea la bota como si fuera maceta?, no usted le abre y le da la llave”.
En esa sala solo quedaron el legislador Mauricio Ramírez Konishi, Paola Arreola Nieto, Marcelina Oviedo Oviedo, quien en un principio trató de impedir que las mujeres ingresaran al salón, pero su intento fue inútil por lo que se limitó a cerrar la puerta.
Desde el otro lado, un murmullo tenue se escuchó ahogado en llanto dirigiéndose al legislador Lárraga Delgado, “me dijo que no importaba que yo me portara mal, que al fin y al cabo mi papá ya estaba muerto (...) él es un hombre que no tiene valores, no respeta a las mujeres, existen ya antecedentes de su comportamiento (…) me robó mis quincenas (…) tengo todo el mes trabajando y no me pagó (….) me dice que ya me vaya, que no me presente”.
Antes de esto los integrantes de la Junta de Coordinación Política fueron saliendo uno por uno, Oscar Vera Fábregat, Martha Barajas, Beatriz Benavente y Edson Quintanar Sánchez, solo se quedaron al interior Paola Arreola Nieto, Mauricio Ramírez Konishi y otros legisladores.
Al salir las manifestantes, salió segundos más tarde el diputado Mario Lárraga Delgado quien fue abordado por la prensa y en primera instancia se dijo ser “completamente inocente”, no obstante al tratar de salir, dos de sus trabajadores lo flanquearon y comenzaron hacerse espacio entre los representantes de los medios usando el peso de su cuerpo y empujando con los codos y rodillas. Las preguntas siguieron y ante la insistencia el legislador se limitó a señalar que la denuncia en su contra era parte de un “chantaje económico”.
La aglomeración de personas en el sitio y la urgencia del diputado y quienes actuaron como guaruras, por salir, propició que se cayeran algunos objetos de la sala de espera y se formara un tapón en la puerta de salida, entre los empujones de una mujer que exigía a gritos salir, se bloqueo la salida, hasta que intervinieron empleados del Congreso y personal de seguridad abriendo la segunda puerta del sitio.
Otro altercado se presentó en las escaleras de salida del recinto legislativo de Vallejo, uno de los reporteros al seguir al diputado fue empujado por su personal y hubo golpes en el conato de violencia en el hubo intervención para que no escalara.
Esta interrupción permitió al legislador salir huyendo al abordar a toda prisa su camioneta con rumbo al poniente de la ciudad.
maria.medrano@clabsa.com.mx
gpl
