Con el respaldo del tres veces excandidato presidencial de izquierda Cuauhtémoc Cárdenas y en el marco del 86 aniversario de la Expropiación Petrolera, la candidata presidencial de Morena, Claudia Sheinbaum, prometió como parte de su plan energético mantener la producción de Pemex en 1.8 millones de barriles diarios, si llega a ganar la elección del próximo 2 de junio.
“En los próximos años, la producción de petróleo se mantendrá en 1.8 millones de barriles diarios. El crecimiento de la demanda debe ser absorbido por fuentes renovables de energía y seguiremos avanzando en la eficiencia de las refinerías actuales para la reducción de importaciones de gasolina y de diesel. Avanzaremos en la reducción de quema de gas natural a la atmósfera y la producción de gas natural para la disminución de las importaciones”, dijo.
Esa producción de petróleo es la misma con la que terminó su sexenio el expresidente Enrique Peña Nieto y que representó una disminución de 27% durante su administración, al bajar de 2.5 a 1.8 millones de barriles diarios de crudo.
Sheinbaum Pardo también presumió la disminución de la deuda de Pemex: “La política energética durante el periodo neoliberal fue, por decir lo menos, desastrosa... [Hubo] un aumento en la deuda de Pemex el sexenio anterior de 52% hasta alcanzar en 2018 la suma de 129 mil millones de dólares. Durante el gobierno del presidente Andrés Manuel López Obrador... la deuda de Pemex disminuyó en 23 mil millones de dólares”, comentó.
La candidata presentó su propuesta de plan energético en el Monumento a la Revolución, en la Ciudad de México, donde montó una guardia de honor en la cripta del expresidente Lázaro Cárdenas, acompañado del ingeniero Cuauhtémoc Cárdenas Solórzano.
Después detalló su plan que contiene seis objetivos: primero, lograr la autarquía energética, es decir, no depender de las importaciones y fortalecer a Pemex y la Comisión Federal de Electricidad (CFE).
“Soberanía, es decir, que México avance en garantizar el suministro de energía con recursos propios. Dicho en lenguaje energético, autarquía energética, depender poco de las importaciones y mantener fuertes y sanas a las empresas del Estado Pemex y CFE”, insistió.
Segundo, la participación clara del sector energético en las finanzas públicas y que la deuda del sector energético sea razonable; tercero, la disminución de la intensidad energética.
“Es decir, que aun cuando aumente el producto interno bruto (PIB), el consumo de energía no se incremente a la misma velocidad o incluso pueda mantenerse constante o disminuir. Dicho de otra forma, desacoplar el consumo de energía del crecimiento económico”, indicó.
Cuarto, garantizar la accesibilidad a la energía eléctrica, el gas y las fuentes renovables de energía: “Esto significa cobertura y precios accesibles, asimismo, accesibilidad de la energía para el desarrollo nacional”, refirió Sheinbaum Pardo.
En quinto lugar, explicó, está la disminución de emisiones contaminantes y de gases de efecto invernadero, y en sexto lugar, la atención a las zonas rurales, “donde aún se consume leña para aumentar la eficiencia en el uso y disminuir las enfermedades del pulmón en las mujeres”.
Para cumplir con los seis objetivos propuso 10 líneas generales, entre las que se encuentran: evitar el aumento del precio de la gasolina, el diesel y las tarifas eléctricas; que Pemex participe en la explotación de litio y en la producción de energía térmica y eléctrica: “La CFE garantizará y fortalecerá la capacidad de transmisión y distribución de energía y mantendrá su participación en la generación eléctrica en al menos 54%.
“En lo que se refiere a la generación de electricidad privada, que se mantendrá en 46% o menos, se establecerán reglas claras que generen certeza y tengan como fin mayor el desarrollo del país, el proceso de industrialización, pero, sobre todo, el bienestar y el interés de la nación. De no ser así, CFE tiene que asumir toda la responsabilidad”, expresó.
Impulsará asimimo un programa de uso eficiente de la energía en los sectores residencial, comercial, transporte e industrial: “Se privatizaron la producción de fertilizantes, la petroquímica y dejaron de producir. Se privatizaron, se cerraron y comenzó la importación...
“Vamos a meterle recursos para poder impulsar nuevamente la industria petroquímica como uno de los ejes centrales del desarrollo de Pemex. Por supuesto, vamos a pedir, si nos lo permite, la asesoría del ingeniero Cuauhtémoc Cárdenas”, anunció la aspirante.
Se promoverá el transporte eléctrico público y privado y se impulsará la transición energética.
La morenista aseguró que en el sexenio del expresidente Peña Nieto no hubo inversiones importantes en la capacidad de transmisión de energía eléctrica de la CFE.
Cárdenas Solórzano dijo que respalda la política e instrumentación que anunció Sheinbaum Pardo: “Me parece muy importante lo que ella ha dicho sobre la política en materia energética, mucho apoyo y fuerte impulso a la petroquímica”.
Destacó que se requiere un organismo autónomo que impulse el crecimiento del país.
El excandidato presidencial reiteró que lo que urge es darle autonomía a Pemex en cuestión de gestión, impulsar la petroquímica y sanear las finanzas de la empresa.