La Dirección General de Seguridad Pública Municipal (DGSPM) en San Luis Potosí reportó al menos 28 unidades patrulla entre camionetas, vehículos sedán y motocicletas que ya no están en condiciones de seguir prestando el servicio operativo en la zona metropolitana.
Ante esto se busca acelerar el procedimiento de baja ante la Oficialía Mayor para poder continuar con el proceso de renovación del parque vehicular una vez que se anunció que al menos 100 millones de pesos serán invertidos para establecer un esquema de arrendamiento de vehículos.
Al respecto, Edgar Jiménez Arcadia, titular de la DGSPM, dijo que desde el inicio de la administración varias unidades que se encontraban averiadas en talleres fueron reintegradas a la circulación, pero fue necesario buscar una inversión para lograr junto al fortalecimiento del taller, con el que cuenta la corporación, efectuar mantenimientos básicos sobre las unidades.
Sin embargo, señaló que esperan que este nuevo esquema de arrendamiento ayude a fortalecer el trabajo de patrullaje que deben realizar los elementos.
Jiménez Arcadia indicó que actualmente se busca que los agentes tengan una mayor movilidad con los vehículos disponibles a efecto de cubrir los cuadrantes que se tienen ubicados en la zona metropolitana para tratar de llegar lo más pronto posible a los eventos que son reportados.
El titular agregó que a través del Programa de Fortalecimiento para la Seguridad (FORTASEG) esperan adquirir otras cuatro camionetas y cinco sedanes lo que ayudará a cubrir parte de las necesidades que aún se tienen en materia de seguridad.
Aunque no quiso establecer cuánto es el requerimiento total de vehículos que actualmente tiene la corporación, Jiménez Arcadia confío en la decisión que la Oficialía Mayor y la presidencia determinen para canalizar nuevas patrullas a través del esquema de arrendamiento.
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vkc