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Una mujer encargada de servicio en una residencia ubicada en el fraccionamiento Sierra Azul recibió una llamada telefónica de una presunta abogada, quien le dijo que era necesario que sacará de la caja fuerte el dinero de los dueños de la casa y algunas joyas, que el dinero era solicitado por parte de la propietaria de la vivienda.
La empleada siguió las órdenes y salió de la casa con una mochila al hombro, donde llevaba las pertenencias solicitadas. El movimiento quedó registrado con las cámaras de seguridad de la propiedad, por lo que los dueños de la casa se entrevistaron con la mujer en su domicilio.
Fue cuando les contó sobre la llamada que recibió durante la mañana del 16 de abril, ella les enseñó el recibo de un deposito en una tienda de conveniencia y las boletas de empeño de las joyas, el monto ascendía a 30 mil 600 pesos. La mujer que se presentó con ella como abogada vía telefónica le indicó que tenía que hacer esos depósitos con urgencia.
Con esas pruebas obtenidas, los agentes acudieron a la casa de empeño para recuperar las prendas, además de iniciar las indagatorias. Las cuatro joyas, quedaron en la bóveda de evidencias de la autoridad ministerial, hasta que sean devueltas a sus legítimos propietarios y continúe la investigación.
Ante esta nueva modalidad de extorsión, se pide a la población estar al pendiente de las llamadas que recibe el personal que labora en los hogares, así como a vigilantes de negocios o empresas, en donde se ha detectado este modus con el que se engaña a los empleados y empleadas, señalando los extorsionadores que son amigos, conocidos y que el dinero es para sus patrones.
apl
