El Hospital Central Ignacio Morones Prieto, de la capital de San Luis Potosí, seguirá estando a cargo del Ejército y siendo operado por éste de manera “indefinida”, mientras no haya una vacuna o medicamento efectivo para combatir al coronavirus, dijo el comandante de la 12 Zona Militar, Gúzmar Ángel González Castillo.
Añadió que, en la actualidad, el personal sigue respondiendo, que hay cansancio, pero buen ánimo y se han extremado medidas sanitarias para evitar que ellos pudieran contagiarse, además de que se les va a recontratar por otros tres meses para que puedan seguir operando este “hospital Covid” como hasta la fecha.
“No nos han dado un tiempo perentorio, es probable que hasta que aparezca la vacuna o medicamento. Una vez que vaya decreciendo la curva de contagio es cuando vamos a recibir indicaciones distintas, pero mientras tanto seguiremos apoyando para estar a cargo de la administración de este hospital”, precisó.
González Castillo recordó que son casi un centenar de elementos los que la Sedena ha dispuesto para operar el Hospital Central, 35 elementos que forman parte de las fuerzas armadas en ramos especializados que tienen que ver con la salud y otros 58 civiles que fueron contratados específicamente para el caso, entre médicos, enfermeras y administrativos divididos en tres turnos.
etp