El estado de Zacatecas enfrenta una crisis alarmante de desapariciones que ha ido en aumento en los últimos años, encendiendo las alertas tanto entre la población como entre organizaciones de derechos humanos.
Según datos del Instituto Mexicano de Derechos Humanos y Democracia (IMDHD), el año 2023 rompió récords al registrar el mayor número de casos desde que existen registros, reflejando una situación crítica que exige atención inmediata de las autoridades.
El incremento sostenido de desapariciones, que comenzó a notarse desde 2010, alcanzó su punto más alto en 2023, con 649 personas reportadas como desaparecidas, de las cuales la mayoría sigue sin ser localizada, por lo que este fenómeno ha convertido a Zacatecas en uno de los focos rojos en la problemática nacional, generando temor e incertidumbre entre las familias y la sociedad en general.
Los últimos tres años han sido especialmente devastadores, ya que han concentrado los totales más elevados de personas desaparecidas en la entidad, mostrando un grave patrón que no parece detenerse y la tendencia ha motivado a las madres buscadoras y familiares de víctimas a organizarse y formar la Unión de Colectivos de Personas Desaparecidas del Estado de Zacatecas en 2023, con el objetivo de exigir al gobierno respuestas y acciones contundentes ante la emergencia.
El aumento de las desapariciones ocurre en un contexto de violencia generalizada, que ha colocado a Zacatecas entre los estados más violentos de México, ya que, en 2024, la tasa de homicidios ascendió a 29.7 por cada 100 mil habitantes, evidenciando un entorno sumamente peligroso y propicio para la comisión de estos delitos. La inseguridad ha permeado todos los sectores de la vida cotidiana, haciendo que la búsqueda de personas desaparecidas sea cada vez más compleja y arriesgada.
Integrantes del colectivo de búsqueda de personas desaparecidas “Sangre de mi Sangre” informaron el pasado domingo, mediante un comunicado, que en la comunidad Sauceda de la Borda —situada a solo 10 kilómetros al suroeste de las ciudades de Guadalupe y Zacatecas— siete hombres jóvenes fueron privados de libertad en apenas dos semanas.
Recientemente, siete cuerpos sin vida fueron encontrados en los límites de Zacatecas y San Luis Potosí por elementos de la Guardia Civil Estatal del estado potosino, que actuaban dentro de los convenios de colaboración existentes entre las entidades y acudían a una llamada de auxilio, siendo sorprendidos de manera “fortuita” por agentes policiacos de Zacatecas, quienes los acusan e incriminan de “sembrar” los cadáveres en la zona.
Ante este panorama, la sociedad zacatecana exige con urgencia la intervención de las autoridades y la implementación de políticas efectivas para frenar las desapariciones y garantizar la seguridad de la población.
La falta de respuestas y de avances en las investigaciones mantiene a cientos de familias en la angustia y la desesperación, mientras la problemática sigue creciendo sin que se vislumbre una solución cercana.