Un trabajo poco común, pero no imposible para que lo realice una mujer es ser despachadora de gasolina, como es el caso de Ivonne Sánchez y María del Socorro Aguilar. Ambas despachan gasolina, revisar niveles de aceite, de llantas y limpian parabrisas.

Madres ejemplares con trabajos poco comunes
Madres ejemplares con trabajos poco comunes

"De repente sí hay clientes como que no creen que nosotros podemos checar eso, pero estamos capacitadas para dar este servicio y más que nada pues estar con una buena sonrisa para que el cliente se vaya satisfecho", explicó María del Socorro.

Pese al riesgo que representa su labor, trabajan alrededor de 8 horas diarias enfrentando diversas dificultades que resuelven sin que la grasa y el aceite de coche les robe la femineidad y sutileza de sus manos.

"Simplemente cuando abre un cofre es muy peligroso abrir el anticongelante cuando viene caliente pero a todo se enseña uno", detalló Ivonne.

Madres ejemplares con trabajos poco comunes
Madres ejemplares con trabajos poco comunes

Aunque es un trabajo que les gusta, también sacrifican su tiempo en casa como madres de familia, por ello, su único objetivo es sacar adelante a sus hijos, Ivonne apoyando a su esposo con los gastos del hogar, mientras que María del Socorro enfrenta la doble responsabilidad de ser madre soltera.

"Yo siempre me dediqué a la zona industrial y mi esposo también trabaja, cuando se acabó el trabajo allá le comenté a mi esposo que me metería a trabajar aquí y me decía que a lo mejor no me gustaba porque se me ensucian las manos y todo eso y le dije pues voy a ver cómo funciona, saber si me gusta y hasta ahorita me gusta mucho mi trabajo, ya tengo 5 años aquí", expresó Ivonne.

Madres ejemplares con trabajos poco comunes
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"Antes estaba en una situación de que no trabajas, no te dejan trabajar por lo mismo de que debes estar con los niños, pero yo me he dado cuenta que se puede trabajar y se puede cuidar los niños a la vez", dijo María del Socorro.

Ningún trabajo es pesado ni lo suficientemente peligroso cuando hay una razón más importante para hacerlo, mucho menos cuando es una madre de familia quien se esmera por conseguir lo que sus hijos necesitan.

"Que valoren el trabajo que nosotros tenemos,  que le echen ganas a su escuela, a sus estudios, para que no anden igual que nosotros, que le echen muchas ganas para que tengan buen estudio", finalizó Ivonne.

apl

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