El principal obstáculo para que un joven consiga empleo siempre ha sido la falta de experiencia en el ramo, lo que durante el primer trimestre del año 2016 representó un 41.5 por ciento del total de desocupados del país, cifra que sumó 2.1 millones de personas. Esta tasa de desempleo juvenil fue la mayor en más de 11 años.

De acuerdo a datos del INEGI, el 19.8 por ciento de los jóvenes desocupados se identifica con la falta de experiencia laboral, mientras que del total de adolescentes y jóvenes no económicamente activos poco más de 16.2 por ciento declararon disponibilidad para trabajar, pero señalaron haber dejado de buscar trabajo o no buscarlo porque piensan que no tienen oportunidad de encontrar uno. El Instituto Mexicano de la Juventud reportó en 2011 que 7 de cada 10 jóvenes consigue su primer empleo a través de redes informales, preferentemente amigos o familiares.

Aunque existe una iniciativa de Ley del Primer Empleo que consiste fundamentalmente en establecer normas para regular, incentivar y fomentar el empleo en los jóvenes, particularmente en el inicio de su actividad laboral formal esta es poco conocida entre ese sector de la población.

En esta Ley se establece que serán beneficiarios del régimen del primer empleo los jóvenes de 18 a 25 años de edad que comprueben que se trata de su primer empleo formal, los trabajadores percibirán entre una y dos veces el salario mínimo vigente pagado por el empleador más un salario mínimo adicional que será pagado por el estado mexicano, bajo la obligación de permanecer en ese trabajo por un año.

vkc

Google News

TEMAS RELACIONADOS