Insatisfacción en la imagen personal, baja autoestima, inseguridad y desconfianza son algunas características que pueden desencadenar trastornos alimenticios en adolescentes, principalmente mujeres, como bulimia y anorexia.

Al respecto, el área de psicología del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) en San Luis Potosí recomendó detectar a tiempo cualquier cambio de conducta alimenticia o física en adolescentes.

Según la Encuesta Nacional de Salud, cada año se registran al menos 20 mil nuevos casos de bulimia y anorexia en jóvenes, es decir, un incremento de 300 por ciento en los últimos años.

De 10 pacientes con este tipo de trastornos, que acuden al consultorio de psicología en el Hospital General de Zona Número 1 del IMSS, 6 o 7 son mujeres y el detonante principal es la falta de autoaceptación.

En el caso de la anorexia se caracteriza por una conducta que se define por el acto de dejar de comer, en el cual el paciente suele percibirse con sobrepeso y obesidad, situación que lo impulsa a dejar de comer de manera abrupta a pesar de tener un bajo peso.

De igual forma, la bulimia es común en personas que no están conformes con su imagen en cuestión de peso y deciden manejar la opción de una dieta aparente ante la familia o gente allegada, pero con la característica de provocarse vómito o purgarse casi al instante después de comer; por lo general se les observa comer de manera desmedida, pero no suben de peso.

La manera más común de detectar este tipo de trastornos es la baja de peso considerable en la persona en un corto tiempo, sobre todo si se trata de alguien que no tiene algún padecimiento crónico, que en tal caso sería un motivo justificable de la pérdida abrupta de peso.

En el tratamiento oportuno de este tipo de padecimientos, el IMSS cuenta con un equipo multidisciplinario integrado por médicos familiares, internistas, dietistas, psicólogos y psiquiatras, con tratamiento de acuerdo a las necesidades de cada paciente según diagnóstico.

La principal recomendación es estar al pendiente en el comportamiento de las y los adolescentes y ante cualquier cambio de conducta en su alimentación y aspecto físico, buscar ayuda profesional y acudir a las unidades de Medicina Familiar correspondiente.

sergio.marin@clabsa.com.mx

vkc

Google News

TEMAS RELACIONADOS