Inexistente el acceso a las leyes de protección a las mujeres

Trabajadoras sexuales se encuentran en desventaja respecto a la accesibilidad para obtener justicia en el tema de la violencia y los feminicidios, pues aun cuando en el discurso oficial se hable de derechos humanos y de igualdad, se trata de un sector estigmatizado al que se le relaciona con el tema de la delincuencia organizada, por lo que las cifras oficiales en torno a la prostitución, prácticamente no existen, afirmó la licenciada en antropología social y especialista en género, estudios sobre trata de personas, prostitución y feminicidio, Ixchel Yglesias González Báez.

Durante su participación en el taller "Trata de personas: víctimas y victimarios: Claves para comprender y prevenir la esclavitud sexual", señaló que la prostitución ha crecido a causa de la trata de personas que se da en el país, fundamentalmente a causa del fenómeno migratorio en el que mujeres de entre 15 a 26 años, son enganchadas por proxenetas, quienes establecen o presentan en la mayoría de los casos una relación de noviazgo para que en todo caso, el delito se sancione como lenocinio y no como trata.

Agregó que en las mujeres prostitutas, la violencia y el feminicidio se normaliza y hay un criterio de discriminación o desigualdad para que sean sujetas al protocolo de atención que debe aplicar en los delitos que se cometen contra la mujer, e incluso las propias autoridades y la corrupción que impera, hace que enfrenten una mayor complejidad en este tema pues deben vivir en la inmediatez para sostener a sus hijos.

“Las omisiones aumentan la violencia, porque al negar el problema, dicen que no es trata sino trabajo voluntario; se construye la imagen de la puta que goza y también se convierte en esta figura moralizante de: si te pasó algo fue por tu culpa, te lo buscaste, estabas en el lugar menos indicado, tú te metiste, y entonces se niega el investigar por trata o violencia, se lavan las manos las autoridades. Cuando matan a una mujer, van decir que iba vestida de tal manera y se genera el discurso que dice que hay mujeres que no deberían ser matadas y hay otras que se lo buscaron, no se genera conciencia, sino al contrario, se legitima la violencia contra las mujeres”, indicó.

Además criticó la constitución de las leyes para la protección de las mujeres o la sanciones para los temas de violencia y feminicidios, pues aseguró que se trata de ordenamientos que en México se importaron  de protocolos como el de Palermo y se tropicalizan localmente, pero no van acordes a la realidad del país en el tema de la trata de personas, lo que hace que prevalezcan las condiciones de vulnerabilidad.

Finalmente señaló que en el caso de San Luis Potosí, desde hace 6 años, el riesgo de las mujeres jóvenes por ser enganchadas, especialmente entre las universitarias, se da más por el lado de las agencias que reclutan bajo el tema de hacer catálogos y después son trasladadas hacia regiones del norte o centro del país.