El colectivo Voz y Dignidad informó mediante sus redes sobre el hallazgo de restos humanos en un predio ubicado en las inmediaciones de la cabecera municipal de Villa Juárez, San Luis Potosí, abriendo la posibilidad de que entre los restos encontrados puedan tratarse del estadounidense y activista Paul Jonathan Brown.
De acuerdo con los primeros reportes, se trataría de osamentas de al menos cuatro personas enterradas de manera clandestina.
El colectivo señaló que entre estos restos podría encontrarse Paul Jonathan Brown, ciudadano estadounidense y reconocido defensor de animales, quien permanece ausente desde el 20 de julio.
Aunque hasta ahora no existe un pronunciamiento oficial por parte de las autoridades, las familias de personas desaparecidas han expresado su preocupación y enojo ante la falta de información clara.
Paul Jonathan Brown, fue fundador del refugio “Ladridos de Esperanza” y era ampliamente conocido por su labor en favor de perros en situación de calle. Para sus allegados y para la comunidad animalista, la posibilidad de que su vida haya terminado de esta forma resulta devastadora.
“Él siempre se entregó a los que no tienen voz, ahora nosotros exigimos justicia y verdad para él, como para cada persona desaparecida en este estado”, expresaron conocidos del activista en redes sociales.
El 20 de julio, un trabajador cercano a Brown acudió con las autoridades para reportar su ausencia, lo que derivó en la emisión de una ficha de búsqueda.
Desde entonces, la incertidumbre marcó el día a día de su familia, amistades y compañeros de causa, que no han cesado en la exigencia de localizarlo con vida.
El reciente hallazgo en Villa Juárez ha encendido las alarmas, pues el sitio en el que se encontraron los restos coincide con la zona donde se le vio por última vez. Sin embargo, será necesario esperar los resultados de las pruebas periciales para determinar la identidad de los cuerpos encontrados.
Hasta el momento, la Fiscalía General del Estado de San Luis Potosí no ha ofrecido detalles sobre las investigaciones ni confirmado las identidades, lo que incrementa la tensión y el dolor de quienes esperan respuestas