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Con la llegada del invierno y las bajas temperaturas en San Luis Potosí, no solo las personas deben protegerse del frío. Las mascotas también son vulnerables a las condiciones climáticas adversas, especialmente aquellas que viven o pasan mucho tiempo al aire libre.
Expertos y organizaciones veterinarias recomendaron una serie de medidas para garantizar su bienestar durante esta temporada.
El Colegio de Médicos Veterinarios de México recomendó proporcionar a las mascotas un lugar cálido y seco. Si los animales permanecen en el exterior, es importante que cuenten con una caseta bien aislada, elevada del suelo y protegida del viento.
Así mismo las cobijas y los materiales térmicos son fundamentales para mantenerlos abrigados, explicó la Dra. Mariana Ramos, veterinaria de la UNAM.
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Evita las largas exposiciones al frío
Las bajas temperaturas durante las madrugadas y noches pueden ser peligrosas para las mascotas, así que es recomendable limitar el tiempo al aire libre y realizar los paseos en las horas más cálidas del día.
El uso de suéteres o abrigos para perros de razas pequeñas, de pelo corto o con poca grasa corporal, como chihuahuas o galgos, puede marcar la diferencia.
"Estas razas son más susceptibles a los cambios de temperatura, por lo que una prenda puede ayudar a mantener su temperatura corporal", señaló la Asociación Mexicana de Médicos Veterinarios Especialistas en Pequeñas Especies.
Alimentación y cuidado especial
Durante el invierno, algunas mascotas necesitan una dieta más calórica para enfrentar el frío, especialmente si son activas o viven en exteriores. Así que los médicos veterinarios también sugieren monitorear constantemente a cachorros, animales geriátricos y aquellos con condiciones médicas, ya que son más propensos a sufrir hipotermia.
Atención a las señales de frío
El temblor, las orejas o patas frías y el letargo son signos de que una mascota puede estar padeciendo frío. En caso de notar alguno de estos síntomas, es importante llevarla a un lugar cálido y consultar al veterinario si no mejora.
El uso de calentadores y chimeneas debe realizarse bajo estricta supervisión, ya que pueden provocar quemaduras o accidentes graves si las mascotas tienen acceso directo a ellos.
