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Además de los adornos y los villancicos, la Navidad trae consigo la unión familiar y con ello llegan las deliciosas comidas y bebidas y para está época fría no puede faltar el atole champurrado, una bebida preparada a base de chocolate y maíz, ingredientes que forman parte de nuestras raíces mexicanas.
Si quieres compartir con tus seres queridos este champurrado para estas fiestas decembrinas, aquí te compartimos la receta.
Ingredientes para el champurrado
- 1 piloncillo
- 2 litros de agua o leche
- 1 rama de canela
- 2 tablillas de chocolate
- 250 gramos de masa fresca
Preparación del champurrado
La receta tradicional suele prepararse con agua, aunque si lo prefieres puedes utilizar leche. Dependiendo de tu gusto puedes agregar más masa para que quede más espeso.
1. Primero hierve en una olla los 2 litros de agua o leche con el piloncillo, agrega la rama de canela. Caliente el agua hasta que hierva a fuego bajo y déjalo cocer por aproximadamente 10 minutos o hasta que se disuelva el piloncillo.
2. Una vez realizado el paso anterior, agrega las 2 tablillas de chocolate y espera unos 5 minutos para que se disuelva, mueve con una cuchara de vez en cuando.
3. En un tazón disuelve la masa con un chorrito de agua y amasa un poco.
4. Cuando el chocolate se haya disuelto completamente, agrega lentamente la masa y sigue revolviendo el agua para que no vayan quedando grumos. Puedes agregarle más masa si deseas que el atole sea espeso.
5. Deja cocer toda la preparación a fuego medio hasta que empiece a hervir, posteriormente reduce el fuego y mantente mezclando. Después de 8 minutos el champurrado espesará. Deja cocinar por 5 minutos más.
6. Si te gusta que salga más espumoso puedes batirlo con un molinillo.
7. Y finalmente sirve en una taza, el champurrado estará caliente para disfrutarse.
Como acabas de ver es una receta muy fácil, con pocos ingredientes y será una buena bebida para estas bajas temperaturas.
Origen del atole champurrado
Esta bebida se remonta hasta la época de los aztecas, quienes solían utilizar el maíz que cultivaban para diversas preparaciones, entre ellas el champurrado. Durante rituales y ceremonias se preparaba esta bebida caliente, posteriormente se agregó el chocolate y con la conquista llegó al territorio la azúcar para darle ese toque más dulce.
Gracias a que se prepara con agua, es ideal para las personas intolerantes a los lácteos. Además, la masa al ser elaborada de maíz es rica en fibra, antioxidantes, potasio, magnesio, fósforo y zinc, así como vitamina B1 y B7.
