Cerca de 100 integrantes de la Unidad Cívica Felipe Carrillo Puerto (UCFCP) se manifestaron la tarde del pasado miércoles 28 de septiembre para exigir el esclarecimiento de la desaparición de los 43 estudiantes de la Escuela Normal de Ayotzinapa, en el estado de Guerrero ocurrida hace dos años.

La marcha inició cerca de las 7 de la noche en la avenida Constituyentes, frente a la entrada principal de la Alameda Hidalgo; caminaron por la calle Pasteur hasta la avenida Zaragoza, en donde dos patrullas de la Policía Municipal de Querétaro comenzaron a resguardar la manifestación.

Eleucadio Ortega y Oscar Ortiz Serafín, padres de Mauricio Ortega y Cutberto Ortiz Ramos respectivamente, dos de los 43 estudiantes desaparecidos encabezaron esta marcha, en la que los simpatizantes portaban las banderas tradicionales de la organización social Felipe Carrillo y algunas pancartas de apoyo a los familiares de los desaparecidos y diversas exigencias relacionadas con los comerciantes que fueron desalojados de la Alameda Hidalgo el pasado mes de junio.

A pesar de la convocatoria que realizaron los organizadores el pasado lunes, fue mínima la participación ciudadana, ya que la mayoría de los manifestantes pertenecían a la UCFCP.

“Se hace indispensable la presentación con vida de los 43 estudiantes”, “Castigo a los culpables”, “Ayotzinapa somos todos”, “Vivos se los llevaron, vivos los queremos”, “No están solos”, fueron algunas de las consignas que se escucharon a lo largo del recorrido que continuó por Corregidora, 16 de septiembre hasta llegar al Jardín Guerrero, en donde se concentraron frente a la Delegación Centro Histórico.

El tránsito fue interrumpido por algunos minutos; los conductores manifestaban su molestia al paso de la columna, sin embargo en ningún momento hubo connatos de bronca.

Frente al Palacio Municipal, Pablo González al tomar la palabra reconoció la lucha de los padres de los 43 normalistas desaparecidos, quienes han recorrido diversas ciudades del país exigiendo justicia por este hecho, el cual calificó de crímenes de lesa humanidad.

“Apoyamos esta emblemática causa de derechos humanos porque somos padres, somos madres, porque hay jóvenes que nos duelen y llevamos dentro el dolor de estos valientes hombres y mujeres que están recorriendo todo el país para denunciar un crimen de lesa humanidad”, manifestó González Loyola.

En su participación, Eleucadio Ortega Carlos, padre de uno de los desparecidos, exigió al gobierno federal la entrega con vida de los 43 normalistas, al tiempo que criticó el actuar de las autoridades que han participado en las diversas investigaciones que se han realizado durante estos dos años.

Recordó que un 26 de agosto de 2014 fue la última vez que vio con vida a su hijo, ya que acudió a las instalaciones de la Escuela Normal de Ayotzinapa – a la cual había entrado un par de semanas antes -, para entregarle 600 pesos que le servirían para cubrir algunos gastos básicos.

Denunció que autoridades estatales de Guerrero llegaron a ofrecer hasta 2 millones de pesos a algunos padres de familia para que desistieran en su búsqueda, sin embargo, estos rechazaron el pago, ya que asegura no descansarán hasta encontrar a sus hijos, los cuales, tienen la esperanza y la confianza de que aún están vivos.

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