Al final de todo el proceso de transición, donde reiteradamente se impulsó la idea del “poder de la cultura”, el gobierno del presidente Andrés Manuel López Obrador optó por una reducción de 522 millones de pesos al sector. El proyecto de Presupuesto de Egresos de la Federación (PEF) 2019, enviado el sábado a la Cámara de Diputados propone una asignación de 12 mil 394 millones de pesos para el sector Cultura.

Los ajustes propuestos en el PEF, que está en manos de los diputados para su reasignación o posible ampliación y que deberán aprobar antes de que concluya el año, evidencian las prioridades del Ejecutivo. Los cambios más radicales con respecto a años anteriores se plantean en las direcciones de Vinculación, Patrimonio Cultural y Administración.

A la Dirección General de Vinculación Cultural se le hace una asignación de 655 millones, frente a los 66 millones del año que termina, lo que representa un incremento en diez veces de su presupuesto.

Asimismo, a la Dirección General de Sitios y Monumentos del Patrimonio Cultural, que este año 2018 ejerce 220 millones, en el proyecto se le asignan poco más de 941 millones de pesos, lo que representa un incremento de cuatro veces más de sus recursos. Esta dirección tuvo hasta hace unos meses a su cargo una parte de la reconstrucción del patrimonio cultural e histórico dañado por los sismos de 2017, pero después todas las tareas las concentró el INAH. Justo para este Instituto, se proponen recursos por 3 mil 739 millones de pesos, que apenas son 71 millones de pesos más respecto al año que termina.

En contraste, la Dirección General de Administración reduce en el proyecto a casi la mitad sus recursos, al pasar de 2 mil 989 millones a mil 670 millones de pesos. Y el INBA pasa de 3 mil 260 millones a una asignación de 3 mil 84 millones de pesos.

Reacciones. El PEF 2019 ha tenido una recepción diversa entre analistas y legisladores. Mientras el presidente de la Comisión de Cultura y Cinematografía de la Cámara de Diputados, Sergio Mayer, asegura no estar sorprendido pues “tenía la conciencia de que el presupuesto iba a venir parecido a éste”, el analista en temas culturales Carlos Villaseñor, asegura que más que hacer juicios sobre la prioridad de la cultura en la actual administración habría que saber “cuál es el rediseño institucional de la secretaria de Cultura para el cual está pensado este presupuesto”.

Por su parte Eduardo Cruz, especialista en economía y cultura, y fundador del Grecu, Grupo de Reflexión en Economía y Cultura, de la Universidad Autónoma Metropolitana, asegura que en cultura no trae nada que pueda beneficiar al sector. “El Presupuesto corresponde al sentido de que las prioridades de la nueva administración están en otros ámbitos y no nos debe sorprender en lo más mínimo lo que estamos viendo”.

Sergio Mayer asegura: “Vamos a intentar ver cómo podemos hacer ajustes y hacer ver la importancia de la cultura. Yo estuve haciendo una campaña durante estos días porque de alguna manera tenía la conciencia de que el presupuesto iba a venir parecido a esto... Sabíamos que iba a pasar esto, sin embargo tenemos la posibilidad de negociar”.

Eduardo Cruz señala que hay capítulos por definirse. “Las asignaciones de etiquetados, de acuerdo a la convocatoria que se hizo por parte de la Comisión de Cultura, no veo de dónde vayan a salir, no encuentro un resquicio presupuestal o una forma de acomodar el gasto público de tal manera que se pueda saber que les van a asignar mil, dos mil, tres mil millones de pesos a todos estos proyectos que se inscribieron”.

Dice que los etiquetados venían en el Ramo 23, y ya no viene nada. “No sabríamos de dónde vendrían esos recursos. ¿A quién le quitas si se supone que tu presupuesto está encajado con tu Ley de Ingresos? Si le das más a cultura ¿a quién se lo vas a quitar?”

El PEF no prevé el presupuesto asignado al Fondo Nacional para el Fomento de las Artesanías (Fonart), organismo que será parte de la Secretaría de Cultura. Sin embargo, el presupuesto que se contempla es de 79 millones y aún está en el de la Secretaría de Bienestar.

El rubro de libros y el fomento a la lectura, que pasaría a ser parte del Fondo de Cultura Económica (FCE), presenta también reducciones. La Dirección General de Publicaciones recibiría 127 millones, mientras que el año pasado fue 144 millones; y Educal recibiría apenas poco más de 32 millones, el año pasado casi recibió 33 millones. En tanto que el FCE, adscrito a la Secretaría de Educación Pública, recibirá 127 millones 874 pesos, mientras que este año que termina ejerció casi 157 millones.

Eduardo Cruz cuestiona que en la Ley de Ingresos se proponen limitaciones en el tema de estímulos fiscales en el cine; no se mencionan otros programas (como Efiartes), pero en el caso del cine plantea una limitación para las empresas que se benefician del estímulo fiscal al cine. 

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