El empresario Alberto Narváez Arochi, miembro de la organización de empresarios del Corredor Cultural Carranza reiteró que los comercios adscritos no asistirán a la Feria Navideña organizada por el Gobierno estatal, sin embargo, deseó lo mejor a quienes sí decidan tomar uno de los lugares ofrecidos en las instalaciones de la Fenapo para este evento.
Reconoció que el año pasado la instalación de la “Villa navideña” en el Centro Histórico y sus atractivos como la colocación de luces, el árbol navideño monumental y la instalación de una pista de hielo, ayudó en la afluencia de personas en el primer cuadro de la capital, por eso pidió que aparte de lo que se realice en las instalaciones de la Fenapo, no se descuide al comercio establecido que esta en el Centro.
“Todos esos elementos -de la Villa navideña del año 2021- hacen que la gente se interese en visitar un lugar y obviamente se reactive la economía. Lo que sí se pediría es que el Centro no se vaya a descuidar, que también se apoye”, añadió.
Narváez Arochi mencionó que el comercio formal es un sector que genera riqueza y apenas comienza a recuperarse de los efectos y daños que dejó la pandemia “apenas estamos saliendo de una pandemia que también afectó gravemente a la economía y hubo ausencia de apoyo de la autoridad en los negocios particularmente pequeños, muchos quebraron”.
El último trimestre, en particular diciembre representa una temporada fuerte para la venta de productos y servicios que ofrecen por lo que consideran que desviar a consumidores a otro lado posiblemente les afectaría.
En este sentido, indicó que la renuencia al ofrecimiento de que los comercios instalen una sucursal en la Fenapo, se debe a que comercios establecidos en el primer cuadro de la capital consideran que cuentan con una mejor infraestructura para ofrecer sus servicios, por lo que consideran poco costeable salir a un espacio abierto y con carencias.
Finalmente, el empresario potosino recordó que desde el gobierno municipal durante campaña electoral también se hizo el compromiso de que en menos de seis meses se reordenaría el comercio ambulante que se encuentra en la vía pública, el cual no se piden que se desaparezca, pero si su regule y de orden pues “en el orden caben todos”, sin embargo hasta la fecha esa promesa no se ha cumplido.