En los tres primeros meses de este 2019, la Cámara de la Industria de la Construcción (CMIC) registra una disminución en su actividad ante la falta de inversión pública.
Manuel Castanedo, presidente local de la CMIC, dijo que la industria constructora permanece en parálisis porque que los gobiernos municipal, estatal y federal no han definido las inversiones que se harán en obra pública, lo cual mantiene preocupación en el sector ya que para subsistir las constructoras han comenzado a despedir a sus trabajadores.
“Hemos tenido que bajar nuestra estructura laboral, estamos trabajando con lo mínimo, tenemos muchos gastos y sin ingresos estamos despidiendo gente”, explicó Castanedo.
Se estima que en los tres primeros meses del año las plantillas laborales de la industria de la construcción han sido reducidas hasta en un 40 por ciento, y no descartan que los recortes vayan en aumento si no se genera inversión en infraestructura.
“Realmente no hay inversión a nivel nacional, no hubo crecimiento siguen importantes recortes y sin infraestructura no estaremos generando riqueza”, concluyó el líder de los constructores.
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