La nueva medida anunciada por el departamento comercial de Estados Unidos, sobre imponer aranceles al acero proveniente de México, es una “mala jugada” que no se esperaba, y en caso de concretarse afectaría al desarrollo del país, coincidieron los dirigentes de cámaras empresariales.
Ricardo Pérez Castillo, presidente de la Unión de Usuarios de la Zona Industrial (UUZI), dijo que habrá que esperar la postura final del presidente Donald Trump, sobre todo porque México ha cumplido con su compromiso en las políticas migratorias.
“Es una jugada que no esperábamos, es muy extraño que después de que nos felicitan por apoyar la política migratoria pongan un nuevo arancel, falta ver la opinión de Donald Trump y sería una pésima señal del aliado comercial si esto se confirma”, apuntó.
Por su parte, el presidente local de Coparmex, Jaime Chalita Zarur lamentó que esta incertidumbre con el país del norte por las medidas arancelarias, que se toman de un día a otro, afecten la competitividad que ha logrado México en los últimos años.
“La competitividad que teníamos la estaríamos perdiendo y habría detención de obras e inversiones muy importantes, va a lastimar si entra en vigor estos aranceles”, explicó el dirigente empresarial.
Ambos representantes de la iniciativa privada subrayaron que se espera que en las próximas semanas se pueda definir el panorama, y el gobierno mexicano llegue a un nuevo acuerdo para evitar la aplicación de este gravamen al acero mexicano.
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