La informalidad continúa ganando terreno y podría seguir creciendo si no se aplican medidas que realmente incentiven a las empresas a regularizarse, advirtió Daniel Escobedo, presidente de la Asociación de Ejecutivos de la Gestión del Talento Humano A.C. (Aderiac).

El representante empresarial subrayó que, aunque no cuenta con cifras específicas de San Luis Potosí, los datos nacionales muestran una tendencia preocupante.

De acuerdo con información del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) explicó, actualmente alrededor del 60 por ciento de las unidades económicas operan en la informalidad, mientras que únicamente el 40 por ciento se encuentran formalmente constituidas.

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Escobedo calificó esta brecha como un desafío que podría ampliarse si no se replantea el enfoque de la política fiscal.

“Lo que vemos es que el número de negocios informales sigue aumentando. Creemos que la reforma fiscal debe orientarse a facilitar que esas empresas den el salto a la formalidad y contribuyan de manera adecuada al pago de impuestos”, señaló.

Aunque no pudo precisar cuánto representa la informalidad en términos de impacto económico, reconoció que es una afectación significativa y que frena el desarrollo de sectores productivos que sí cumplen con sus obligaciones.

Sobre las propuestas impulsadas por la iniciativa privada, el presidente de Aderiac recordó que la Alianza Empresarial presentó una serie de planteamientos ante el Congreso de la Unión, enfocados principalmente en mejorar esquemas de prestaciones e incentivos.

Sin embargo, lamentó que hasta ahora no hayan recibido respuesta: “Las propuestas están ahí, los diputados las conocen, pero no han sido incorporadas. Confiamos en que en la próxima legislatura sí puedan avanzar”.

A nivel estatal y municipal, Escobedo destacó que sí ha habido acercamientos y diálogo constante.

Señaló que tanto el gobierno de San Luis Potosí como el ayuntamiento de la capital se han comprometido a no aplicar incrementos en los impuestos para el siguiente ejercicio fiscal, lo que representa un alivio para las empresas formales.

En torno al rumor sobre un posible incremento al impuesto sobre nómina, Escobedo fue claro: “Nos dijeron directamente que no existe una propuesta formal; nosotros tampoco hemos visto nada en ese sentido”.

El líder de Aderiac reiteró que la estabilidad fiscal local es positiva, pero insistió en que el verdadero reto está en el plano nacional, donde urge impulsar políticas que no castiguen a quienes ya están en la formalidad y que, en cambio, ayuden a regularizar a miles de negocios que permanecen al margen de la ley.

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