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Luego de los cuestionamientos de Profeco por un estudio que revela los niveles de arsénico contenidos en el agua mineral de Peñafiel, la empresa responde que el arsénico es un mineral que se encuentra en la naturaleza, además de que “está presente en el aire, en el suelo y en distintos alimentos de consumo diario”.
En un comunicado, Grupo Peñafiel sostiene que los niveles de concentración de este elemento natural varían de acuerdo a distintos factores, por ejemplo, por cuestiones meteorológicas estacionales y geológicas.
Detalla que “Food and Drug Administration (FDA) establece un rango de 10 partes por billón (ppb), el mismo que aplica para la Norma Oficial Mexicana de Agua Mineral, el cual es un valor guía emitido por la Organización Mundial de la Salud”. Y sobre la medición que indica que su producto estaba en 17 ppb, aclaran que esa cifra responde a “ligeras variaciones” sin representar un riesgo para la salud.
Por otra parte, Peñafiel destaca que su producto nunca ha tenido restricciones de venta o de consumo en Estados Unidos, además de que, como parte de sus procesos de manufactura, continuamente realizan verificaciones, muestreos, actualizaciones y mejoras en sus estándares de calidad.
Finalmente, la marca asegura que está altamente comprometido con la transparencia, calidad y seguridad en su productos, además de que constantemente colabora con instancias gubernamentales, tal como Cofepris y Profeco.