El gasto de pensiones se convertirá en una bola de nieve durante el sexenio de Andrés Manuel López Obrador, porque tendrá que desembolsar cada año más recursos para cumplir el compromiso financiero.
De acuerdo con los Criterios Generales de Política Económica, se prevé que cumplir este pasivo costará casi 3.4 por ciento del Producto Interno Bruto (PIB) al concluir 2018.
El documento detalla que la cifra subirá en todo este gobierno. Crecerá a 3.5 por ciento el próximo año; a 3.7 por ciento, en 2020; a 3.8 por ciento, un ejercicio después; a 4 por ciento, en 2022, escalará a 4.2 por ciento en el siguiente, y a 4.3 por ciento al terminar 2024.
Significa que crecerá 0.9 puntos porcentuales durante el sexenio.
La Secretaría de Hacienda y Crédito Público sacó estas proyecciones de estudios actuariales y la tendencia de los últimos años.
Las pensiones y jubilaciones son uno de los rubros del gasto ineludibles para el gobierno federal.
El gasto de pensiones, además de incluir las obligaciones de pago de las entidades a los trabajadores o sus beneficiarios en el momento de su retiro, también considera las primas de antigüedad, beneficios suplementarios de planes de pensiones posteriores al retiro y cualquier otra remuneración que se otorgue al término de la relación laboral.
El gobierno acepta que una de las causas del creciente gasto de pensiones se deriva del envejecimiento de la población, producto de una mayor longevidad y menor fertilidad, por lo cual es un reto central para generar una estrategia en el tema.
“Desde hace algunas décadas, la población adulta en edad de pensionarse en México crece a una tasa mayor que el resto de la población joven. Esta transición demográfica presenta un reto para la sostenibilidad de las finanzas públicas debido a que el gasto de pensiones y salud aumenta con el crecimiento de la población de mayor edad.
“Se estima que para 2019, la población en México con edad para pensionarse será de 9.5 millones de personas, mientras que para 2040 se prevé que se duplique y alcance 19.5 millones”, detalla el documento.
Un elevado gasto. El documento que elaboró la Secretaría de Hacienda y que aprobó el Congreso, detalla que el gasto en pensiones ascenderá a 877 mil 464 millones de pesos el próximo año, 6.4 por ciento mayor al monto erogado este año.
Lo que destinará el gobierno para cubrir ese compromiso es equivalente a financiar casi tres veces a la Secretaría de Educación Pública (SEP), cuyo presupuesto es de 308 mil millones de pesos para 2019.
La mayor tajada del gasto en jubilaciones se concentra en IMSS, con 432 mil 941 millones de pesos, e ISSSTE, con 226 mil 143 millones.
De los 877 mil 464 millones de pesos que es el gasto de pensiones, 659 mil 84 millones son para ambas instituciones, es decir, tres de cada cuatro pesos de ese rubro son para atender los compromisos de ex trabajadores afiliados al IMSS e ISSSTE.
Otros 104 mil 224 millones de pesos se van para cubrir a ex empleados de las empresas productivas del Estado, de los cuales, 63 mil 565 millones son para Pemex, y los restantes 40 mil 659 millones, para CFE.
Con los recursos pensionarios de Pemex se puede cubrir el presupuesto de la Secretaría de Comunicaciones y Transportes (SCT), de 66 mil 554 millones de pesos en 2019. El pago por jubilaciones de CFE equivale al gasto de la Secretaría del Trabajo.
Los restantes 114 mil 157 millones de pesos son de ex servidores públicos del gobierno federal.