Sin previo aviso, el Servicio de Administración Tributaria (SAT) cambió el proceso para descargar de manera rápida y masiva las facturas electrónicas conocidas como comprobantes fiscales digitales por internet (CFDI).
La decisión ha provocado complicaciones y el enojo de los contribuyentes, sobre todo de las grandes empresas, porque de acuerdo con especialistas, representa un retroceso de 10 años en medio de la era tecnológica y en pleno cierre de mes.
Si antes se podían bajar del portal del SAT mil facturas en tres minutos, ahora se tienen que esperar 48 horas para que se las autorice y después hay que descomprimir el archivo con que se entrega la factura.
A finales de julio, el SAT hizo dos modificaciones para descargar los CFDI desde su portal. Introdujo filtros que obstaculizan el trabajo de contabilidad de las empresas.
Javier Zepeda, experto fiscal y en facturación electrónica explicó en qué consiste lo que hizo el SAT.
El primer cambio es que cuando el contribuyente selecciona los comprobantes a descargar, ya sea uno o más, debe capturar un código.
Lo anterior, asegura, frena descargar de manera masiva por cualquier aplicación, porque obliga a poner un código de seguridad.
La segunda modificación impide bajar las facturas de manera inmediata, menciona.
“Afecta a todos los contribuyentes: cuando se seleccionan varios comprobantes fiscales para descargar no se podrá hacer al momento porque el SAT fijó un tiempo de respuesta no mayor a 48 horas”.
Es decir, que como autoridad fiscal, tiene dos días para entregar las facturas que el contribuyente desea bajar de la plataforma del SAT; al momento se les da un código único o un folio fiscal para que luego vuelvan a ingresar a las descargas de los comprobantes e introducir dicho código para terminar el proceso.
Pero no sólo eso, advierte, al agregar que el SAT entrega facturas descargadas en un archivo zip, lo que significa que los comprobantes saldrán en una carpeta comprimida.
“Esto viene a afectar tecnológicamente a los contribuyentes porque la mayoría ya estaba acostumbrado a que descargaba el CFDI de una manera natural y en su formato original, sin que viniera comprimidas ni nada, esos comprobantes prácticamente pasaban directamente al proceso de la contabilidad”, explica.
Pero ahora con una carpeta comprimida obligará al contribuyente a realizar un paso adicional, es decir, “descomprimir” la carpeta.
“No hay razón tecnológica ni lógica que lo justifique, es un tiempo brutalmente excesivo”, acusa.
Para llorar. El experto afirma que la situación está para lamentar, porque el sentimiento de los contribuyentes es de rabia, enojo y de “quiero llorar”, frente a las más drásticas modificaciones que ha hecho el SAT en su portal, pero sobre todo la de mayor problemática que está causando.
A los Proveedores Autorizados de Certificación (PAC) el SAT les mandó un aviso oficial en el cual menciona que va a publicar un nuevo servicio de descargas masivas y que estará disponible a partir del 6 de agosto.
De entrada, al contribuyente no le queda más que esperar 48 horas o que el SAT, a partir del 6 de agosto tenga listo el nuevo servicio de descarga masiva, dice el experto.
“Si esas fechas no se cumplen va a causar más dolores de cabeza porque su proceso (contribuyentes y empresas) en este momento lo está haciendo de manera manual”, sentencia el experto.
De acuerdo con su experiencia, el proceso puede irse hasta el 15 de agosto, porque el SAT sólo va a liberar el nuevo servicio de descarga masiva para los PAC’s, no se lo va a dar a los contribuyentes directamente.
Y los proveedores tendrán un tiempo de espera y respuesta para actualizarlo para descargar facturas desde el portal del SAT.