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Celso García, ganador en festivales internacionales de cine como Cartagena, Gijón, Guadalajara y Montreal, será el responsable del remake de La boda de mi mejor amigo, que hace 20 años protagonizó Julia Roberts.
El rodaje arrancará rodaje en marzo próximo, con elenco por definir, teniendo a Guadalajara y a la Ciudad de México como locaciones para contar la historia.
Producida por Sony México se respetará la esencia del filme, aunque con personajes treintañeros, edad mayor que la vista en la entrega original de 1997.
Como en aquella, una chica se da cuenta estar enamorada de su mejor amigo días antes de que éste contraiga matrimonio y hace lo posible para impedirlo.
“Es un clásico, pero hay una nueva generación que no la conoce, entonces lo harán con la versión mexicana”, comenta García, realizador de La delgada línea amarilla y el corto La leche y el agua.
La adaptación de La boda de mi mejor amigo corre a cargo de Gabriel Ripstein (Compadres y Amor a primera visa).
La dirección de fotografía recaerá en Emiliano Villanueva (Hidalgo, la historia jamás contada)
García considera que no debe ser mal visto realizar el remake de un éxito hollywoodense.
“Es contar una historia de calidad sin importar el país, es hacer algo que conecte con la gente y trascienda más allá de las dos horas (en cine). Es una película que cuando la pasan los domingos se sienta uno a verla, ha envejecido bien y ese es el reto con esta”, indica el entrevistado.
Durante su corrida comercial, La boda de mi mejor amigo recaudó 299 millones de dólares, contra 38 millones usados en rodaje.
vkc