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Paul Walker acababa de cumplir 40 años cuando murió al chocar su Porsche contra un poste de luz. El 30 de noviembre de 2013 fue un día trágico para la familia del actor, los fanáticos de sus películas y todo Hollywood. Pero nadie sintió la muerte de Paul tan dolorosamente como Vin Diesel.
Rápidos y Furiosos fue la saga que unió los caminos de ambos actores. La historia sobre un policía encubierto, Brian O’Connor (Paul Walker) y el jefe de un equipo de carreras ilegales, Dominic Toretto (Vin Diesel), se convirtió en todo un éxito de taquillas.
Por 14 años y siete películas vimos a Brian y Dom unir fuerzas en pantalla, mientras en la vida real se creaba un vínculo entre Paul y Vin.
Vin Diesel ha hablado varias veces de la excelente relación que tenía con su coestrella. Aunque Diesel ahora es una súper estrella de los filmes de acción, comenzó su carrera como cadenero de clubes nocturnos. El actor sentía que Paul, quien pasó un tiempo viviendo en las calles, entendía como nadie sus orígenes humildes.
“Crecimos juntos en el negocio y nos hicimos famosos juntos”, dijo Diesel. En una ocasión, cuando Vin sentía que su familia estaba explotando su fama, llamó a Walker para desahogarse. Su amigo habló con la familia Diesel y el problema se solucionó de inmediato.
Cuando Paul murió, estaba a punto de terminar sus escenas para Rápidos y furiosos 7. Durante el rodaje, Vin tuvo una horrible premonición. Luego de filmar una secuencia de acción especialmente peligrosa, Diesel se preguntó qué pasaría si se muriera.
Vin visitó a Paul en su camerino y le pidió que, en caso de morir, le dijera al mundo lo buen amigo que había sido. Los actores se abrazaron… y esa sería la última vez que Vin Diesel vería con vida a su inseparable compañero.
Cuando se enteró del choque fatal, Vin Diesel se sumió en depresión. Se encerró en su casa por semanas y no dejaba de llorar. El día después del accidente, Diesel se reunió con Cheryl, la madre de Paul. A pesar de que Cheryl acababa de perder a su hijo, fue ella quien le dio las condolencias a Vin.
“Acabas de perder a tu otra mitad”, le dijo Cheryl a Diesel.
Volver al set fue una de las decisiones más difíciles en la carrera de Vin Diesel, pero sabía que debía terminar lo que él y Paul habían empezado.
De hecho, en varias premiaciones y eventos de la cinta, Diesel se mostró al borde de las lágrimas al hablar de Paul, o "Pablo", como le decía a su amigo de cariño.
Aunque Paul Walker ya había grabado casi todas las escenas de Rápidos y furiosos 7, el final de la historia se ajustó para hacerle honor a su legado. Sabemos que lloraste al oír la canción final, See You Again, pero no te sientas avergonzado, porque Diesel tampoco puede verla sin soltar una lágrima.
El compositor Charlie Puth le confesó a Diesel que había creado la canción tan sólo en 10 minutos. Fue fácil para el músico crear un tema conmovedor, ya que uno de sus amigos también había muerto recientemente en un accidente automovilístico.
Aún después de finalizar el rodaje de Rápidos y furiosos 7, Diesel sigue recordando a su mejor amigo con tiernos gestos. La cuarta hija del actor, Pauline, lleva ese nombre en honor a Walker.
Cada año, en el aniversario de la muerte o cumpleaños de Paul Walker, Vin Diesel le dedica un conmovedor mensaje en sus redes sociales.
En 2016, Vin Diesel nos obsequió esta foto, en la que se ve al actor jugando con su hija mientras Paul los mira desde el cielo.
En 2017, Diesel nos compartió esta imagen de su hija jugando con Paul Walker, a quien llamaba de cariño “Tío Pablo”. “Todos los ángeles te extrañan… yo te extraño”, comentó Vin en la imagen.
Con información de The Sun, Today, Bustle, People, CNN, HollywoodLife y USA Today
