La iglesia católica potosina llamó a las autoridades estatales y municipales para que sean extremadamente rigoristas con sus elementos, y apliquen los exámenes de control y confianza para que los ciudadanos puedan tener la certeza de que harán un trabajo profesional y alejado de los intereses de la delincuencia.
Su vocero Juan Jesús Priego Rivera dijo que los ciudadanos no pueden estar más a merced de aquellos elementos policíacos que puedan estar coludidos con la delincuencia y que “juegan en dos bandos”, ya que son cada vez aquellos casos en los que se habla presuntamente de policías que actúan en contra de la sociedad.
Así mismo el vocero del arzobispado refirió que en el proceso de depuración que se ejecute sobre las corporaciones se tienen que hacer inversiones que son necesarias, en el sentido de que aquellos elementos que no reúnen el perfil o que se les compruebe un manejo que no va con la ética de su trabajo, deberán recibir su finiquito a pesar de que el gobierno argumente que no cuenta con los recursos para poder llevar a cabo esta tarea.
“Esto de tal manera que tengamos la plena certeza que las personas que visten el uniforme son confiables y podemos entregarles nuestra confianza y seguridad”, señaló.
Cuestionado si a los elementos no les queda de otra al ser obligados por el mismo crimen, el sacerdote señaló que se trata de una cuestión de principios, ya que si un policía es coaccionado o violentado es preciso que acuda con sus superiores y dé cuenta de lo que está sucediendo, y éstos a su vez deberán tener el compromiso de cuidar y proteger a sus elementos, de lo contrario no podrá haber confianza entre la ciudadanía, concluyó.
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