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Desde la mañana del día de este miércoles, manifestantes bloquearon la entrada al edificio de la Comisión Estatal de Derechos Humanos (CEDH) para exigir la renuncia de la presidenta Giovanna Arguelles Moreno y de la primera visitadora Laura Aguilar Pérez.
En entrevista para EL UNIVERSAL San Luis Potosí, una de las manifestantes de nombre María de Jesús Almendarez señaló que su manifestación se debe a que no le han resuelto algunos expedientes de queja que ha interpuesto, al ser ella trabajadora de gobierno y haber sido víctima de violencia sexual. Asimismo, las y los demás manifestantes protestan por sus propios casos al no obtener justicia.
“El tema en general es las omisiones de Giovanna, por eso queremos que renuncie porque ya no la aguantamos, ya son muchos años con sus omisiones y que no nos resuelva”, explican.
Por ello, los inconformes aseguraron que la toma de las instalaciones de la CEDH seguirá hasta que no se presente alguna autoridad que les garantice la renuncia de Giovanna Arguelles y de Laura Aguilar. Para esto, esperan tener la ayuda de la candidata Ruth González Silva, al considerar que se trata de una persona humanitaria y que defiende a las mujeres.
”Este año no más hay tres quejas, si tienen más de mil expedientes. ¿Qué les están haciendo a los demás expedientes? Si esta institución sólo a eso se dedica”, se cuestionan.
Denuncian omisión en otras protestas
María de Jesús Almendarez señaló que ya se han manifestado por esta misma causa en otras dos ocasiones, el pasado lunes en Congreso del Estado y hace unas semanas al cerrar avenida Carranza. “No hemos tenido respuesta de ella, no hay diálogo con ella”.
El pasado lunes, fue Silvia Castillo quien tomó el micrófono de la manifestación al protestar por la muerte de su hijo Alan, quien fue asesinado en 2019. Frente al edificio del Congreso, levantó una vendimia de su ropa y pertenencias, debido a que ya no cuenta con recursos para seguir en su lucha.
“Como no tengo para ir a México, porque ellos me quitaron el megáfono, ellos me quitaron la bandera con la que protesto, entonces tengo yo que vender mis cosas. Ya no tengo ningún apoyo de nadie, pero estoy vendiendo aretes, todo para poder irme a México a protestar”, lamentó Silvia.
