Ante la próxima temporada decembrina y el manejo de pirotecnia, la Fundación Rino Q estima un crecimiento de al menos 25 por ciento en los casos que son atendidos por quemaduras principalmente entre niños de 6 a los 12 años de edad.
Sin embargo, entre las personas que más sufren accidentes son los adultos por manipular artefactos explosivos, ya que tan solo el año anterior se reportaron alrededor de 30 casos por esta situación, informó Gerardo García Lozano, director de la fundación.
García Lozano indicó que durante el año anterior se registraron hasta 200 personas entre niños y adultos con quemaduras, por ello consideró que se necesita que exista más conciencia entre la población respecto a los riesgos que implica el manejo de la pirotecnia.
El director señaló que en este año Rino Q ha atentado a 85 niños con quemaduras, y desde que se comenzó a trabajar en este tema acumulan aproximadamente 520 niños debido a que muchos de ellos pueden llegar a recibir hasta 30 cirugías, de ahí que la atención y las terapias que se otorgan van aumentando año con año.
García Lozano agregó que en muchas ocasiones los menores de edad que sufren la explosión de un artefacto, son traslados al Hospital Central para recibir atención ambulatoria, y posteriormente acuden en los meses de enero y febrero a la fundación para comenzar con el tratamiento.
Asimismo, insistió en que los adultos deben ser los principales promotores de la prevención y evitar comprar cohetes a sus hijos para que no se presenten situaciones que lamentar.
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