En San Luis Potosí se estima que tres de cada mil pequeños nacen con sordera total, por lo que la aplicación del tamiz auditivo desde el nacimiento es determinante para establecer el grado de deficiencia auditiva que pueden llegar a tener los neonatos, señaló Olga Álvarez Avitia, audióloga de la Secretaría de Salud.
Apuntó que esta prueba puede efectuarse en el Hospital del Niño y la Mujer, la cual desarrolla de 550 a 600 estudios por mes; y explicó que el tamiz es un estudio que permite detectar en el pequeño si está escuchando bien desde el nacimiento, tiene sospecha de sordera o alguna otra situación auricular importante.
“Por eso el tamiz auditivo se hizo universal, antes se les hacía solo a una parte de los pequeños. Hoy en día se los hacemos a todos y nos permite conocer si tienen alguna afectación, es el primer estudio básico y con ello podemos apoyarlos posteriormente a ir solucionando sus problemas, ya que el oído está relacionado directamente con el lenguaje”, detalló Olga Álvarez.
La especialista dio a conocer que hasta los tres años de edad es el límite para que un pequeño pueda superar un problema de la audición, ya que en esa etapa está el conocimiento del mundo, el niño ya habla y tiene un leguaje práctico, y la audición está completamente ligada al conocimiento total de las cosas.
“Puede ser que usemos algún tipo de aparato auditivo para potenciar su oído, de acuerdo al grado de hipoacusia, que es la disminución de la capacidad de la audición que puede ser unilateral o bilateral; ya si a los cuatro años no mejoró, el pequeño será candidato a implante coclear”, agregó la especialista.
Álvarez Avitia invitó a los padres a que permitan que se efectúen pruebas de tamizaje auditivo a todos sus pequeños recién nacidos, a fin de ir previendo situaciones posteriores.
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vkc