La principal causa de ceguera en niños es la retinopatía del prematuro, la cual afecta a uno de cada 10 niños que nacen de manera anticipada; a pesar de esto muchos bebés no reciben el tamizaje visual para diagnosticarla y cuando manifiestan síntomas el daño ya es irreversible.
Así lo señaló la médico María Ana Martínez, una de las pocas especialistas en retinopatía pediátrica en el país, durante la presentación de la primera unidad de retina pediátrica a nivel Latinoamérica.
“La retinopatía pediátrica es la principal causa de ceguera infantil. Si se diagnostica a tiempo puede ser reversible y el niño no tiene por qué perder su visión; sin embargo, la falta de equipo, de capacitación y de información hace que esto no ocurra en la mayoría de los casos”, remarcó la especialista.
Según comentó Martínez esto se debe a que los recién nacidos no pasan el tiempo suficiente formándose dentro de la madre, por lo que pueden nacer con todo tipo de deficiencias, una de ellas es la visual.
“Estos pequeños tienen menos tiempo para fortalecerse por lo que suelen tener más probabilidades de padecer problemas de desarrollo en general”, expresa.
Una forma de diagnosticar a tiempo si un bebé padece este tipo de retinopatía es mediante el tamiz visual, el cual fue establecido como obligatorio el sexenio pasado sin embargo, muchas personas lo desconocen.
“Como mucha gente no sabe que existe y que es obligación de toda clínica realizarlo, la gente no lo pide pero con esta simple prueba muchos casos de ceguera infantil podrían evitarse”, dijo la oftalmóloga.
Otras causas de ceguera infantil son partos complicados, infecciones adquiridas durante la lactancia, enfermedades contagiadas durante el embarazo (como toxoplasmosis o zica), causas genéticas y el uso de remedios caseros.
De acuerdo con la especialista se espera que de aquí a cinco años la unidad especializada atienda a un promedio de 36 mil niños al año con un nivel de especialidad y tecnología de primer nivel para todos los estratos económicos.