Morelia.— Un grupo armado irrumpió anoche en una funeraria de Uruapan, Michoacán, y disparó contra los asistentes, donde de manera preliminar se tiene un saldo de seis personas muertas y al menos cuatro lesionados, informaron autoridades policiales de la región.

Los hechos ocurrieron en la avenida Juárez, casi esquina con Francisco Villa, en el Barrio de la Magdalena, donde velaban a una persona que por la mañana había sido asesinada y abandonada afuera del lugar conocido como La Pinera, de esa ciudad ubicada a 112 kilómetros de la capital michoacana.

Resultado del ataque elementos de la Policia Michoacán, del Ejército y de la Policía Federal resguardaron la zona, e implementaron un operativo especial en Uruapan, ya que algunas versiones mencionaron hablaban de la movilización de grupos armados.

La procuraduría de Michoacán indicó que los cuatro lesionados fueron trasladados a un hospital regional, el cual se encuentra resguardado bajo un fuerte dispositivo de seguridad.

Uruapan es uno de los territorios controlados por el cartel de los Viagra, pero que le pelea el Cártel Jalisco Nueva Generación.

Y en Zacatecas, atacan novenario. Al asesinato de Diego Rosendo y un acompañante afuera de un bar de Fresnillo, el pasado 14 de julio, se le sumó una estela de ocho muertos y 17 heridos en dos ataques registrados en menos de 10 días; el más reciente se perpetró el pasado martes durante la celebración del novenario, donde ultimaron el padre del joven.

Primero, durante el velorio del menor de 17 años —asesinado afuera de un bar en el centro de Fresnillo—, un grupo armado abrió fuego contra los asistentes y ultimó a seis personas, 16 más resultaron heridas. El martes pasado, al concluir el novenario de Diego Rosendo, un nuevo ataque dejó otras dos víctimas.

De acuerdo con las autoridades estatales de seguridad, esta ola de violencia podría estar ligada a la rivalidad encarnizada que hay entre integrantes de los cárteles del Golfo y del Noreste por la disputa de esa plaza.

El pasado 24 de julio, la familia del joven realizaba el novenario, pero casi al finalizar la celebración católica hombres armados irrumpieron en la vivienda y asesinaron a Ezequiel “N”, padre de Diego Rosendo, y a otra familiar.

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